Y Jesús le respondió: – “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente”.
Mateo 10:37 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia El que ama a su padre o a su madre más que a mí, no es digno de mí; y el que ama a su hijo o a su hija más que a mí, no es digno de mí; Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí; Biblia Nueva Traducción Viviente »Si amas a tu padre o a tu madre más que a mí, no eres digno de ser mío; si amas a tu hijo o a tu hija más que a mí, no eres digno de ser mío. Biblia Católica (Latinoamericana) El que ama a su padre o a su madre más que a mí, no es digno de mí; y el que ama a su hijo o a su hija más que a mí, no es digno de mí. La Biblia Textual 3a Edicion El que ama a padre o madre más que a mí, no es digno de mí; el que ama a hijo o hija más que a mí, no es digno de mí; Biblia Serafín de Ausejo 1975 El que ama a su padre o a su madre más que a mí, no es digno de mí; y el que ama a su hijo o a su hija más que a mí, no es digno de mí; Biblia Reina Valera Gómez (2023) El que ama padre o madre más que a mí, no es digno de mí; y el que ama hijo o hija más que a mí, no es digno de mí. |
Y Jesús le respondió: – “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente”.
Por lo que el rey dijo a sus empleados: La boda ya está preparada, pero los invitados originales no eran dignos;
– Si alguien quiere seguirme, pero pone en primer lugar a su padre, a su madre, a su cónyuge, a sus hijos, a sus hermanos y a sus hermanas, es más, si no renuncia a su propia vida, no puede ser mi discípulo.
Pero después de la resurrección, ya no habrá ni casamiento ni muerte, viviremos en otra realidad.
Estén alertas, orando en todo tiempo, para que escapen de todas estas cosas que van a suceder, y se mantengan íntegros ante el Hijo del Hombre.
para que todos honren al Hijo como honran al Padre. El que no honra al Hijo, no honra al Padre, porque el Padre envió a su Hijo.
Sin embargo, tienes en Sardis a unos pocos que no se han ensuciado la ropa; ellos, por ser dignos, andarán conmigo con vestiduras blancas.