Después de que mataron a Esteban, los creyentes judíos se dispersaron tratando de escapar de la persecución. Fueron a Fenicia, Chipre y Antioquía de Siria; y predicaban, pero solamente entre los judíos.
Hechos 13:4 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia Así que, enviados por el Espíritu Santo, Bernabé y Saulo llegaron a Seleucia y de ahí navegaron a la isla de Chipre. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Ellos, entonces, enviados por el Espíritu Santo, descendieron a Seleucia, y de allí navegaron a Chipre. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Bernabé y Saulo fueron enviados por el Espíritu Santo. Descendieron hasta el puerto de Seleucia y después navegaron hacia la isla de Chipre. Biblia Católica (Latinoamericana) Enviados por el Espíritu Santo, Bernabé y Saulo bajaron al puerto de Seleucia y de allí navegaron hasta Chipre. La Biblia Textual 3a Edicion Así que ellos, enviados por el Santo Espíritu, bajaron a Seleucia, y de allí navegaron a Chipre. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Ellos, pues, con esta misión del Espíritu Santo, bajaron a Seleucía y de allí navegaron hacia Chipre. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Así que ellos, enviados por el Espíritu Santo, descendieron a Seleucia; y de allí navegaron a Chipre. |
Después de que mataron a Esteban, los creyentes judíos se dispersaron tratando de escapar de la persecución. Fueron a Fenicia, Chipre y Antioquía de Siria; y predicaban, pero solamente entre los judíos.
Ellos estaban en un culto de adoración para el Señor y mientras estaban ayunando, el Espíritu Santo dijo: – Apártenme a Bernabé y a Saulo para la misión que les he encomendado.
Entonces, después de ayunar y orar, les impusieron las manos a Bernabé y a Saulo, y los despidieron.
Después de algunos días, Pablo dijo a Bernabé: – Volvamos y visitemos a los hermanos de cada ciudad donde anunciamos la Palabra del Señor, para ver como están.
lo único que sé es que el Espíritu Santo me dice en cada ciudad que en Jerusalén me esperan aflicciones y prisiones.
Cuando salimos de Sidón, navegamos con el viento en contra. Entonces nos acercamos a la costa de la isla de Chipre para protegernos del viento.
Un ejemplo de esto fue José, un levita natural de Chipre, a quien los apóstoles llamaban Bernabé, que significa “el que consuela a los demás”.