Elías, el profeta de Tisbé de Galaad, le dijo al rey Acab: «Tan cierto como que el Señor, Dios de Israel, vive, el Dios al cual adoro y sirvo, te digo que no habrá rocío ni lluvia durante varios años en Israel, hasta que yo lo diga».
Levítico 26:4 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 yo les daré las lluvias con regularidad, la tierra producirá cosechas abundantes, y los árboles darán frutos por más tiempo que el normal. Aún estarán madurando las uvas cuando llegue el tiempo de la siembra. Comerán hasta saciarse, y vivirán seguros en la tierra, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 yo daré vuestra lluvia en su tiempo, y la tierra rendirá sus productos, y el árbol del campo dará su fruto. Biblia Nueva Traducción Viviente les enviaré las lluvias de temporada. Entonces la tierra les dará sus cosechas y los árboles del campo producirán su fruto. Biblia Católica (Latinoamericana) les enviaré las lluvias a su tiempo para que la tierra dé sus productos y los árboles del campo sus frutos. La Biblia Textual 3a Edicion entonces Yo daré vuestras lluvias en su época y la tierra rendirá su cosecha y el árbol del campo dará su fruto. Biblia Serafín de Ausejo 1975 os mandaré la lluvia a su tiempo, la tierra rendirá sus productos y los árboles del campo darán su fruto. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Yo daré vuestra lluvia en su tiempo, y la tierra dará su producto, y el árbol del campo dará su fruto; |
Elías, el profeta de Tisbé de Galaad, le dijo al rey Acab: «Tan cierto como que el Señor, Dios de Israel, vive, el Dios al cual adoro y sirvo, te digo que no habrá rocío ni lluvia durante varios años en Israel, hasta que yo lo diga».
Desde tu casa en las nubes, envías la lluvia sobre las montañas, y llenas la tierra con el fruto de tu trabajo.
Dios, el Dios nuestro, nos bendecirá, los pueblos de todos los confines de la tierra le temerán.
Tú enviaste lluvia abundante, oh Dios, para reanimar a tu cansada herencia.
Sí, el Señor derrama sus bendiciones sobre la tierra y esta produce abundantes cosechas.
Entonces Dios los bendecirá con lluvia en el tiempo de la siembra y con grandes cosechas y abundantes pastos para su ganado.
No la podaré ni la escardaré sino dejaré que la invadan maleza y espinos. Ordenaré a las nubes que no lluevan más sobre ella.
¿Qué dios pagano puede darnos lluvia? ¿Quién sino tú, oh Señor Dios nuestro, puede hacer cosas así? Por tanto, de ti esperaremos auxilio».
Les daré abundantes cosechas de sus árboles frutales y sus campos, y nunca más pasarán hambre ni ninguna necesidad.
No tengan miedo, animales del campo, pues en las praderas abundará el pasto. Los árboles darán su fruto; las higueras y las vides florecerán de nuevo.
Si me obedecen, la tierra les dará buenas cosechas, y podrán comer hasta saciarse.
La respuesta es: Los bendeciré con cosechas extraordinarias el sexto año, lo que les permitirá vivir hasta que obtengan la cosecha del octavo año.
Yo estoy poniendo las bases para que ustedes gocen de paz y prosperidad. Sus cosechas serán abundantes, los viñedos estarán sobrecargados de uvas, la tierra será fecunda y habrá abundancia de lluvia para sus cosechas. Todas estas bendiciones serán dadas al pequeño grupo del pueblo que quedó en la tierra después del exilio.
De esta forma estarán actuando como hijos de su Padre que está en el cielo, porque él da la luz del sol a los malos y a los buenos y envía la lluvia a los justos y a los injustos.
aunque nunca las dejó sin algo que hablara de él. ¡Y les dio la lluvia, las buenas cosechas, y llenó de alimentos y alegría los corazones!
»Si ustedes obedecen cuidadosamente todos los mandamientos que les voy a entregar en este día, y si aman al Señor su Dios con toda su mente y con toda su vida, y lo adoran,
él les enviará lluvia que caiga a su tiempo, tanto la de otoño como la de primavera, que haga producir ricas cosechas de grano, de uvas en sus viñedos y de aceite de sus olivares.
Él te abrirá el maravilloso tesoro de las lluvias de los cielos para que tengas ricas cosechas en cada estación. Él te bendecirá en todo lo que hagas; y tú prestarás a muchas naciones, y no tendrás necesidad de pedir prestado de ellas.
Por eso, hermanos, tengan paciencia hasta que el Señor venga. Sean como el agricultor que espera a que la tierra dé su precioso fruto y aguarda con paciencia las temporadas de lluvia.
Estos tienen poder para cerrar los cielos de manera que no llueva mientras estén profetizando. También tienen poder para convertir en sangre las aguas y enviar plagas sobre la tierra cada vez que lo deseen.