Porque si obedeces cuidadosamente las normas y reglamentos que él dio a Israel por medio de Moisés, vas a prosperar. ¡Sé enérgico y valiente, entusiasta y sin miedo!
Hebreos 2:1 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Por lo tanto, es necesario que prestemos más atención al mensaje que hemos oído, no sea que nos extraviemos. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Por tanto, es necesario que con más diligencia atendamos a las cosas que hemos oído, no sea que nos deslicemos. Biblia Nueva Traducción Viviente Así que debemos prestar mucha atención a las verdades que hemos oído, no sea que nos desviemos de ellas. Biblia Católica (Latinoamericana) Por eso debemos prestar más atención al mensaje que escuchamos, no sea que vayamos a la deriva. La Biblia Textual 3a Edicion Por lo cual debemos dar más solícita atención a las cosas que fueron oídas, no sea que las dejemos escurrir.° Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por eso tenemos que prestar la mayor atención a lo que hemos oído, para no extraviarnos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Por tanto, es necesario que con más diligencia atendamos a las cosas que hemos oído, no sea que en algún momento las dejemos deslizar. |
Porque si obedeces cuidadosamente las normas y reglamentos que él dio a Israel por medio de Moisés, vas a prosperar. ¡Sé enérgico y valiente, entusiasta y sin miedo!
¿Cómo puede mantenerse íntegro el joven?, viviendo conforme a tu palabra.
Estoy levantando una nueva potencia en el escenario mundial: los caldeos. Esa es una nación cruel y violenta que marchará por el mundo y conquistará con su poderoso ejército a las naciones vecinas.
Dentro de poco tu propia grandeza será transformada en vergüenza. ¡También tú caerás y serás humillada! ¡El Señor desatará sobre ti su juicio!
¿Cuándo van a entender? ¿Ya se les olvidó que alimenté a cinco mil personas con cinco panes, y que sobraron varias cestas de comida?
¿Acaso tienen ojos y no ven, y oídos y no escuchan? ¿Ya no se acuerdan de
La que cayó en buena tierra representa a los que oyen la palabra con un corazón bueno y sincero. Estos la retienen y, porque perseveran, producen una buena cosecha.
―Pongan mucha atención a lo que les voy a decir: El Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres.
Entonces los judíos tomaron piedras para arrojárselas, pero Jesús se escondió y salió del templo.
Cuídense de no quebrantar el pacto del Señor su Dios. Si se fabrican ídolos, lo estarán quebrantando, porque el Señor, el Dios de ustedes, lo ha prohibido.
Pero ¡cuidado! No olviden jamás lo que Dios hace por ustedes. Cuenten a sus hijos y a sus nietos los gloriosos milagros que él ha hecho.
Acaso han olvidado ya las palabras de aliento que como a hijos se les dirige: «Hijo mío, no tomes como algo sin importancia la disciplina del Señor ni te desalientes cuando te reprenda,
con la esperanza de que queden tan grabados en su mente que los recuerden aun mucho después de mi partida.