Ven pronto, amado mío, como gacela o cervatillo sobre las colinas cubiertas con yerbas aromáticas.
Apocalipsis 22:20 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 El que da testimonio de estas cosas declara: «Sí, vengo pronto». ¡Amén! ¡Ven, Señor Jesús! Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 El que da testimonio de estas cosas dice: Ciertamente vengo en breve. Amén; sí, ven, Señor Jesús. Biblia Nueva Traducción Viviente Aquel que es el testigo fiel de todas esas cosas dice: «¡Sí, yo vengo pronto!». ¡Amén! ¡Ven, Señor Jesús! Biblia Católica (Latinoamericana) El que da fe de estas palabras dice: 'Sí, vengo pronto.
Amén. Ven, Señor Jesús. La Biblia Textual 3a Edicion El que da testimonio de estas cosas dice: ¡Sí, vengo pronto! ¡Amén, sí, ven Señor Jesús! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dice el que da fe de estas cosas: 'Sí, vengo pronto'. Amén. 'Ven, Señor Jesús'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) El que da testimonio de estas cosas, dice: Ciertamente vengo en breve. Amén, así sea. Ven: Señor Jesús. |
Ven pronto, amado mío, como gacela o cervatillo sobre las colinas cubiertas con yerbas aromáticas.
En aquel día proclamará el pueblo: «Este es nuestro Dios, en quien confiamos, a quien hemos esperado. Ahora por fin está aquí». ¡Qué día de regocijo!
Jesús hizo muchas otras cosas, tantas que, si se escribiera cada una de ellas, creo que en el mundo entero no cabrían los libros que se escribieran.
Si alguien no ama al Señor, que Dios lo maldiga. ¡Ven, Señor nuestro!
Por lo demás, me espera la corona de justicia que el Señor, juez justo, me dará en aquel gran día. Y no sólo a mí, sino a todos los que con amor esperan su venida.
así Cristo fue ofrecido una sola vez en sacrificio para quitar los pecados de muchos. Y aparecerá por segunda vez, pero no para cargar con el pecado, sino para salvar a quienes lo esperan.
el que vive aunque estuvo muerto; pero ahora vivo para siempre y tengo las llaves del infierno y de la muerte.
Juan puso por escrito la palabra de Dios y el testimonio de Jesucristo, y narró con veracidad todo lo que vio y oyó.
Si no te arrepientes, iré pronto a ti y pelearé contra ellos con la espada de mi boca.
Y luego añadió: «No escondas las palabras del mensaje profético de este libro, porque la hora de su cumplimiento se acerca.
«¡Miren, vengo pronto! Traigo conmigo la recompensa que he de dar a cada uno según sus obras.
Solemnemente le advierto a cualquiera que escuche las palabras del mensaje profético de este libro: Si alguno añade algo a lo que está escrito, Dios le añadirá a él las plagas que se describen en este libro.
«Vengo pronto. ¡Bendito el que cree las palabras proféticas que están escritas en este libro!».