»No busquen la venganza. No conserven rencor en el corazón, sino amen a su prójimo como a ustedes mismos, porque yo soy el Señor.
1 Juan 4:21 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Dios mismo ha dicho que no sólo debemos amarlo a él, sino también a nuestros hermanos. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y nosotros tenemos este mandamiento de él: El que ama a Dios, ame también a su hermano. Biblia Nueva Traducción Viviente Y él nos ha dado el siguiente mandato: los que aman a Dios deben amar también a sus hermanos creyentes. Biblia Católica (Latinoamericana) Pues éste es el mandamiento que recibimos de él: el que ama a Dios, ame también a su hermano. La Biblia Textual 3a Edicion Y este mandamiento tenemos de parte de Él: el que ama a Dios, ame también a su hermano. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y este mandamiento tenemos de él: que quien ama a Dios, ame también a su hermano. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y nosotros tenemos este mandamiento de Él: Que el que ama a Dios, ame también a su hermano. |
»No busquen la venganza. No conserven rencor en el corazón, sino amen a su prójimo como a ustedes mismos, porque yo soy el Señor.
»También conocen el mandamiento que dice: “Ama a tu prójimo y odia a tu enemigo”.
El maestro de la ley contestó: ―El que se compadeció de él. Entonces Jesús le dijo: ―Anda pues y haz tú lo mismo.
Toda la ley se resume en este mandamiento: «Amarás a tu prójimo como a ti mismo».
Estando unidos a Cristo Jesús no cuenta nada si estamos circuncidados o no. Nos basta la fe que actúa a través del amor.
Con respecto al amor entre los hermanos, no hace falta que les escriba, porque Dios mismo les ha enseñado a amarse unos a otros.
En fin, vivan ustedes en armonía unos con otros. Compartan sus penas y alegrías, ámense como hermanos, tengan compasión y sean humildes.
Sobre todo, ámense en gran manera unos a otros, porque el amor cubre muchos pecados.
Queridos hermanos, no me estoy refiriendo a ningún mandamiento nuevo, sino al mandamiento antiguo que desde un principio han tenido ustedes.
Desde el principio se nos ha enseñado que debemos amarnos unos a otros.
Si amamos a los demás hermanos, hemos pasado de la muerte a la vida. El que no ama a los demás está muerto.
Hijitos míos, que nuestro amor no sea sólo de palabra ni de labios para afuera, sino que amemos de veras y demostrémoslo con hechos.
Su mandamiento es que creamos en Jesucristo su Hijo y que nos amemos unos a otros, como lo mandó.
Amados, ya que Dios nos ha amado tanto, debemos amarnos unos a otros.