Vamos a matarlo: lo echamos en una cisterna y luego decimos que una bestia feroz lo devoró. Veremos en qué paran sus sueños'.
Génesis 45:3 - Biblia Martin Nieto José dijo a sus hermanos: 'Yo soy José. ¿Vive todavía mi padre?'. Sus hermanos no pudieron responderle, de tan asustados que estaban ante él. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y dijo José a sus hermanos: Yo soy José; ¿vive aún mi padre? Y sus hermanos no pudieron responderle, porque estaban turbados delante de él. Biblia Nueva Traducción Viviente «¡Soy José! —dijo a sus hermanos—. ¿Vive mi padre todavía?». ¡Pero sus hermanos se quedaron mudos! Estaban atónitos al darse cuenta de que tenían a José frente a ellos. Biblia Católica (Latinoamericana) José dijo a sus hermanos: 'Yo soy José. ¿Vive aún mi padre?' Ellos quedaban tan aterrados de verlo que no podían responderle. La Biblia Textual 3a Edicion Y dijo José a sus hermanos: ¡Yo soy José! ¿Vive aún mi padre? Y sus hermanos no pudieron responderle, porque estaban turbados por su presencia. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dijo, pues, José a sus hermanos: 'Yo soy José. ¿Vive todavía mi padre?'. Sus hermanos no pudieron responderle, porque quedaron aterrados ante él. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y dijo José a sus hermanos: Yo soy José: ¿Vive aún mi padre? Y sus hermanos no pudieron responderle, porque estaban turbados delante de él. |
Vamos a matarlo: lo echamos en una cisterna y luego decimos que una bestia feroz lo devoró. Veremos en qué paran sus sueños'.
Y se decían unos a otros: 'Verdaderamente estamos pagando lo que hicimos con nuestro hermano. Lleno de angustia nos pedía clemencia, y no le hicimos caso. Por eso nos ha venido esta desgracia'.
Rubén les respondió: 'Ya os dije yo que no hicierais ningún mal al muchacho, pero no me escuchasteis. Ahora se nos pide cuentas de su sangre'.
Él les preguntó: '¿Qué tal estáis? ¿Cómo está vuestro padre, del que me hablasteis? ¿Vive todavía?'.
Por eso estoy ante su faz horrorizado; y cuanto más lo pienso, más me aterra.
Y porque ahora te llega a ti la hora, te turbas; te toca a ti, y ya estás desalentado.
Pero entonces infundiré sobre la casa de David y sobre los habitantes de Jerusalén un espíritu de buena voluntad y de súplica. Volverán sus ojos hacia el que traspasaron con la espada y harán luto por él como por un hijo único. Y llorarán por Jerusalén como se llora por el primogénito.
pues todos lo vieron y se asustaron. Jesús, en seguida, les habló y les dijo: 'Tranquilizaos; soy yo, no tengáis miedo'.
Al ver esto Simón Pedro, cayó a los pies de Jesús, diciendo: 'Señor, apártate de mí, que soy un hombre pecador'.
La segunda vez José se dio a conocer a sus hermanos, y el Faraón conoció a la familia de José.
Él preguntó: '¿Quién eres, Señor?'. Y él: 'Yo soy Jesús, a quien tú persigues.
Miradlo, viene entre nubes; lo verán todos, aun los que lo traspasaron, y se lamentarán sobre él todas las naciones de la tierra. Sí. Amén.