Se le acercó y le dijo: '¿Vas a destruir al justo juntamente con el pecador?
Éxodo 23:7 - Biblia Martin Nieto No intervengas en causas injustas y no hagas morir al inocente y al justo, porque yo no absolveré al malvado. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 De palabra de mentira te alejarás, y no matarás al inocente y justo; porque yo no justificaré al impío. Biblia Nueva Traducción Viviente »Asegúrate que nunca acuses a nadie falsamente de algún mal. Jamás condenes a muerte a una persona inocente o intachable, porque yo nunca declaro inocente al culpable. Biblia Católica (Latinoamericana) Aléjate de la mentira. No harás morir al inocente ni al justo, porque yo no perdonaré al culpable. La Biblia Textual 3a Edicion Te alejarás de acusaciones falsas, y no matarás al inocente ni al justo, porque Yo no justificaré al culpable. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Aléjate de cualquier causa mentirosa; no hagas perecer al inocente y justo, pues yo no absuelvo al culpable. Biblia Reina Valera Gómez (2023) De palabra de mentira te alejarás, y no matarás al inocente y justo; porque yo no justificaré al impío. |
Se le acercó y le dijo: '¿Vas a destruir al justo juntamente con el pecador?
Si vuelves al todopoderoso y te humillas, si alejas de tu tienda la iniquidad,
Ellos se ensañan en la vida del justo y condenan a muerte al inocente;
No corras rumores falsos; no apoyes al que sostiene una causa injusta, dando falso testimonio.
que conserva su fidelidad a mil generaciones y perdona la iniquidad, la infidelidad y el pecado, pero que nada deja impune, castigando la maldad de los padres en los hijos y en los nietos, hasta la tercera y cuarta generación'.
Ciertamente no quedarán impunes los injustos, mas la posteridad de los justos se salvará.
Absolver al culpable y condenar al justo son dos cosas que odia el Señor.
El que camina en la justicia y habla rectamente, el que rechaza una ganancia arrancada a la fuerza, el que sacude su mano para no aceptar soborno, tapa sus oídos para no oír intrigas de sangre y cierra sus ojos para no ver el mal:
¡Ay de aquellos que llaman bien al mal y mal al bien; que cambian las tinieblas en luz y la luz en tinieblas; que dan lo amargo por dulce y lo dulce por amargo!
No andarás difamando a los tuyos ni pondrás en peligro la vida del prójimo con falsas acusaciones: yo, el Señor.
El Señor es paciente, pero de gran poder, y no deja pasar nada. El Señor camina en la tempestad y en el huracán, y las nubes son el polvo de sus pies.
Le preguntaron también unos soldados: 'Y ¿nosotros qué debemos hacer?'. Y les contestó: 'No intimidéis a nadie, no denunciéis falsamente y contentaos con vuestra paga'.
La ira de Dios se manifiesta desde el cielo contra toda la impiedad e injusticia de los hombres que detienen la verdad con la injusticia;
Por esto, desterrad la mentira, y que cada uno diga la verdad a su prójimo, pues somos miembros los unos de los otros.
Si dos hombres tienen un pleito, se presentarán al tribunal, que decidirá sobre ellos: se absolverá al justo y se condenará al culpable.
¡Maldito el mercenario que mate por dinero a un inocente! Y todo el pueblo responderá: ¡Amén!