Si obraras bien, ¿no alzarías la cabeza?; en cambio, si obras mal, el pecado está a las puertas de tu casa y te acosa sin que puedas contenerlo'.
2 Corintios 5:9 - Biblia Martin Nieto Por eso, en el cuerpo o fuera del cuerpo, nos esforzamos por agradar al Señor, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Por tanto procuramos también, o ausentes o presentes, serle agradables. Biblia Nueva Traducción Viviente Así que, ya sea que estemos aquí en este cuerpo o ausentes de este cuerpo, nuestro objetivo es agradarlo a él. Biblia Católica (Latinoamericana) Pero al final, sea que conservemos esta casa o la perdamos, lo que nos importa es agradar al Señor. La Biblia Textual 3a Edicion Por lo cual también procuramos, ya presentes, o ausentes, serle agradables, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por eso también nuestra ambición es serle gratos, tanto si estamos domiciliados como si estamos exiliados. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Por tanto procuramos también, o presentes, o ausentes, serle agradables. |
Si obraras bien, ¿no alzarías la cabeza?; en cambio, si obras mal, el pecado está a las puertas de tu casa y te acosa sin que puedas contenerlo'.
los llevaré a mi monte santo y les daré alegría en mi casa de oración. Sus holocaustos y sus sacrificios serán aceptos en mi altar, pues mi casa se llamará casa de oración para todos los pueblos.
Procuraos no el alimento que pasa, sino el que dura para la vida eterna; el que os da el hijo del hombre, a quien Dios Padre acreditó con su sello'.
que acepta al que le es fiel y practica la justicia, sea de la nación que sea.
Pues el que en esto sirve a Cristo, agrada a Dios y es estimado de los hombres.
Pues si vivimos, para el Señor vivimos; y si morimos, para el Señor morimos. Así que, vivamos o muramos, somos del Señor.
he puesto todo mi empeño en no anunciar el evangelio allí donde ya habían oído hablar de Cristo, para no construir sobre cimientos puestos por otros,
Por esto, queridos hermanos, manteneos firmes, inconmovibles, trabajando más y más en la obra del Señor, sabiendo que el Señor no dejará sin recompensa vuestro trabajo.
Estamos siempre confiados, sabiendo que, mientras habitamos en el cuerpo, caminamos lejos del Señor,
Pero estamos seguros, y preferimos salir de este cuerpo para vivir junto al Señor.
para hacer resplandecer la gracia maravillosa que nos ha concedido por medio de su querido Hijo.
y os comportéis de una manera digna del Señor, intentando complacerle en todo, fructificando en toda obra buena y creciendo en el conocimiento de Dios,
con miras a lo cual me fatigo y lucho apoyado en la fuerza de Cristo, que obra poderosamente en mí.
En fin, hermanos, os pedimos y os exhortamos en el nombre de Jesús, el Señor, a que os portéis de la manera que os enseñamos para agradar a Dios; ya lo hacíais, pero hacedlo todavía mejor.
y a que con todo empeño os afanéis en vivir pacíficamente, ocupándoos en vuestros quehaceres y trabajando con vuestras propias manos, como os lo tenemos recomendado.
Por esto nos esforzamos y luchamos, porque tenemos puesta nuestra esperanza en Dios vivo, que es el Salvador de todos los hombres, sobre todo de los creyentes.
Así pues, puesto que entramos en posesión de un reino inmutable, retengamos firmemente la gracia, y por ella ofrezcamos a Dios un culto agradable con reverencia y con respeto.
Esforcémonos, pues, por entrar en este reposo, para que nadie sucumba imitando aquel ejemplo de desobediencia.
Por lo cual, queridos hermanos, en espera de todas estas cosas, esforzaos por encontraros sin mancha, sin culpa y en paz en presencia del Señor.