Y añadió: 'Esta tarde os dará el Señor carne para comer, y mañana por la mañana pan hasta saciaros, porque ha oído vuestras murmuraciones contra él. Pero nosotros ¿qué somos? No van contra nosotros vuestras murmuraciones, pero sí contra el Señor'.
1 Samuel 8:7 - Biblia Martin Nieto Pero el Señor dijo a Samuel: 'Obedece la voz del pueblo en todo lo que te diga, porque no te han rechazado a ti, sino a mí, para que no reine sobre ellos. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y dijo Jehová a Samuel: Oye la voz del pueblo en todo lo que te digan; porque no te han desechado a ti, sino a mí me han desechado, para que no reine sobre ellos. Biblia Nueva Traducción Viviente «Haz todo lo que te digan —le respondió el Señor—, porque me están rechazando a mí y no a ti; ya no quieren que yo siga siendo su rey. Biblia Católica (Latinoamericana) y Yavé dijo a Samuel: 'Atiende a todo lo que te dice este pueblo, porque no es a ti a quien rechazan sino a mí. Ya no quieren que reine sobre ellos. La Biblia Textual 3a Edicion Y YHVH dijo a Samuel: Oye la voz del pueblo en todo lo que te digan, porque no te han rechazado a ti, sino que me han rechazado a mí, para que no reine sobre ellos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Yahveh dijo a Samuel: 'Atiende la voz del pueblo en todo lo que te digan, pues no es a ti a quien han rechazado, sino a mí, para que no reine yo sobre ellos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Jehová dijo a Samuel: Oye la voz del pueblo en todo lo que te dijeren: porque no te han desechado a ti, sino a mí me han desechado, para que no reine sobre ellos. |
Y añadió: 'Esta tarde os dará el Señor carne para comer, y mañana por la mañana pan hasta saciaros, porque ha oído vuestras murmuraciones contra él. Pero nosotros ¿qué somos? No van contra nosotros vuestras murmuraciones, pero sí contra el Señor'.
así yo también me recrearé en su desgracia y haré recaer sobre ellos lo que temen; porque he llamado y nadie ha respondido, he hablado y no han escuchado. Han hecho lo que es malo a mis ojos, han elegido lo que a mí no me agrada.
Al cabo de siete años cada uno de vosotros dejará libre a su hermano hebreo que le haya sido vendido; estará a tu servicio seis años y luego lo dejarás en libertad. Pero vuestros padres no escucharon ni hicieron caso.
Él me dijo: 'Hijo de hombre, yo te envío a los israelitas, a un pueblo de rebeldes, que se han rebelado contra mí, ellos y sus padres, hasta este mismo día.
Pero la casa de Israel no querrá escucharte a ti, como no quiere escucharme a mí, porque toda la casa de Israel es de cabeza dura y corazón de piedra.
Dios se apareció a Balaán durante la noche y le dijo: '¿No han venido estas gentes a llamarte? Levántate y vete con ellos, pero no hagas más que lo que yo te diga'.
'El que os recibe a vosotros me recibe a mí, y quien me recibe a mí recibe a quien me ha enviado.
El que os escucha a vosotros me escucha a mí; y el que os rechaza a vosotros me rechaza a mí; y el que me rechaza a mí rechaza al que me ha enviado'.
Pero sus conciudadanos lo odiaban y enviaron tras él una embajada diciendo: No lo queremos por rey.
En cuanto a mis enemigos, esos que no me quisieron por rey, traedlos aquí y degolladlos en mi presencia'.
Os aseguro que el criado no es más que su amo, ni el enviado más que quien lo envía.
Pero Gedeón les respondió: 'No reinaré yo sobre vosotros ni mi hijo, porque es el Señor quien debe reinar sobre vosotros'.
Y vosotros rechazáis hoy a vuestro Dios, que os ha salvado de todas vuestras desgracias y peligros, al pedir que os ponga un rey sobre vosotros. Por tanto, presentaos ante el Señor por tribus y por clanes'.
Samuel dijo a los israelitas: 'Os he concedido todo lo que me habéis pedido y he puesto sobre vosotros un rey.
Sin embargo, cuando visteis que Najás, rey de los amonitas, venía contra vosotros, me dijisteis: No, que reine un rey sobre nosotros, siendo así que el Señor, vuestro Dios, es vuestro rey.
y el Señor le dijo: 'Atiende su petición y pon un rey sobre ellos'. Entonces Samuel dijo a los israelitas: 'Id cada uno a vuestra ciudad'.
Así se han portado conmigo desde el día que los saqué de Egipto hasta hoy, abandonándome para servir a dioses extranjeros, y así se portan ahora contigo.