Tomó después Rebeca vestidos de Esaú, su hijo mayor, los más bonitos que tenía en casa, y se los puso a Jacob, su hijo menor.
1 Reyes 20:6 - Biblia Martin Nieto Por tanto, mañana, a estas horas, te mandaré mis súbditos, que registrarán tu casa y las casas de tus súbditos. Todo lo que les agrade lo tomarán y se lo llevarán'. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Además, mañana a estas horas enviaré yo a ti mis siervos, los cuales registrarán tu casa, y las casas de tus siervos; y tomarán y llevarán todo lo precioso que tengas. Biblia Nueva Traducción Viviente pero mañana a esta hora, enviaré a mis funcionarios a registrar tu palacio y las casas de tus funcionarios. ¡Se llevarán todo lo que más valoras!”». Biblia Católica (Latinoamericana) ten por seguro que mañana a la misma hora enviaré a mis servidores a tu casa. Registrarán tu casa y las casas de tus servidores, y recogerán y traerán para acá todo lo que les guste'. La Biblia Textual 3a Edicion Porque si no, mañana a esta hora te enviaré mis siervos, los cuales registrarán tu casa y las casas de tus siervos, y tomarán y se llevarán cuanto haya agradable a tus ojos. Biblia Serafín de Ausejo 1975 mañana a estas horas te mandaré mis servidores, para que registren tu casa y las de tus servidores; echarán mano a todo lo que les parezca valioso y se lo llevarán''. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Además mañana a estas horas enviaré yo a ti mis siervos, los cuales inspeccionarán tu casa, y las casas de tus siervos; y sucederá que todo lo precioso que tienes ellos lo tomarán con sus manos y se lo llevarán. |
Tomó después Rebeca vestidos de Esaú, su hijo mayor, los más bonitos que tenía en casa, y se los puso a Jacob, su hijo menor.
David dijo a Gad: '¡Estoy en gran aprieto! Pongámonos en manos de Dios, porque es grande su misericordia, antes que caer en manos de los hombres'.
Pero los emisarios volvieron de nuevo, diciendo: 'Esto dice Ben Hadad: Envío a decirte: Me debes entregar tu plata, tu oro, tus mujeres y tus hijos.
Entonces el rey de Israel convocó a todos los ancianos del país y dijo: 'Considerad y ved la injusticia que éste busca: me ha mandado a pedir mis mujeres y mis hijos, después de no haberle negado mi plata y mi oro'.
veinte copas de oro, que pesaban ocho kilos, y dos vasos de hermoso cobre dorado, preciosos como el oro.
Los escultores de ídolos, todos juntos, no son nada; sus obras, que tanto aprecian, no sirven para nada. Sus testigos no ven nada, ni se enteran de nada. Por eso serán avergonzados.
¡Gritad, pastores; gritad, revolcaos en la tierra, mayorales del rebaño, porque ha llegado el día de vuestra matanza; caeréis como carneros escogidos!
El opresor ha alargado su mano a todos sus tesoros; ella ha visto a los gentiles penetrar en su santuario, a quienes tú habías prohibido entrar en tu comunidad.
Jerusalén se acuerda de sus días de miseria y de aflicción; cuando caía su pueblo en manos del enemigo sin que ninguno le ayudara; sus adversarios la miraban y se reían de su ruina.
Efraín es fecundo entre las cañas; pero llegará el solano, el viento del Señor se alzará del desierto, secará sus manantiales, agotará sus fuentes y se llevará todos sus tesoros, sus objetos preciosos.
Pero el que invoque el nombre del Señor se salvará; porque en el monte Sión y en Jerusalén estará el grupo de salvados, como ha dicho el Señor, y entre los supervivientes estarán los que llame el Señor.