Jacob le respondió: 'Los años de mi peregrinar son ciento treinta. Pocos e infelices han sido los años de mi vida, y no alcanzaré los años de vida de mis padres durante su peregrinación'.
1 Pedro 1:17 - Biblia Martin Nieto Y si invocáis como Padre al que juzga imparcialmente a cada uno según sus obras comportaos respetuosamente mientras estáis de paso en este mundo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y si invocáis por Padre a aquel que sin acepción de personas juzga según la obra de cada uno, conducíos en temor todo el tiempo de vuestra peregrinación; Biblia Nueva Traducción Viviente Recuerden que el Padre celestial, a quien ustedes oran, no tiene favoritos. Él los juzgará o los recompensará según lo que hagan. Así que tienen que vivir con un reverente temor de él durante su estadía aquí como «residentes temporales». Biblia Católica (Latinoamericana) El Padre que invocan no hace diferencias entre personas, sino que juzga a cada uno según sus obras; tomen, pues, en serio estos años en que viven fuera de la patria. La Biblia Textual 3a Edicion Y si invocáis por Padre al que juzga imparcialmente según la obra de cada uno, conducíos con temor todo el tiempo de vuestra peregrinación, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y si invocáis como Padre al que juzga imparcialmente a cada uno según sus obras, conducíos con temor en el tiempo de vuestra peregrinación, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y si invocáis al Padre, que sin acepción de personas juzga según la obra de cada uno, conducíos en temor todo el tiempo de vuestra peregrinación; |
Jacob le respondió: 'Los años de mi peregrinar son ciento treinta. Pocos e infelices han sido los años de mi vida, y no alcanzaré los años de vida de mis padres durante su peregrinación'.
Ante ti somos extranjeros y emigrantes, como lo fueron todos nuestros padres. Nuestros días sobre la tierra pasan como sombra en la cual no hay esperanza.
Temed al Señor, sed justos, porque el Señor no tolera la injusticia, la parcialidad y el soborno'.
Que no hace acepción de prepotentes ni considera al rico más que al pobre, porque son todos obra de sus manos.
Tú corriges al hombre castigando la falta, como una polilla corroes su tesoro, el hombre no es nada más que un soplo.
extenderé su mano hasta el Mediterráneo y su derecha hasta el Éufrates.
El sabio teme y se aparta del mal, pero el insensato es insolente y se cree seguro.
Dichoso el hombre que está siempre en el temor, el que endurece su corazón caerá en la desventura.
Y yo me decía: ¿Te contaré entre mis hijos y te daré un país de delicias, la heredad más preciosa de las naciones? Yo pensaba: Me llamarás padre, y ya no te alejarás de mí.
Yo daré entonces a los pueblos labios puros para que invoquen todos el nombre del Señor y le sirvan de común acuerdo.
Porque el hijo del hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles, y entonces dará a cada uno según sus obras.
Le enviaron discípulos suyos con los herodianos a decirle: 'Maestro, sabemos que eres sincero, que enseñas de verdad el camino de Dios y que no te importa nada el qué dirán, porque no tienes respetos humanos.
'Vosotros rezad así: Padre nuestro que estás en el cielo, santificado sea tu nombre,
Bien, fueron cortadas por su incredulidad, y tú por la fe estás en pie. No seas orgulloso y ten mucho cuidado.
os deseo la gracia y la paz de Dios, nuestro Padre, y de Jesucristo, el Señor.
Estamos siempre confiados, sabiendo que, mientras habitamos en el cuerpo, caminamos lejos del Señor,
Hermanos míos, ya que tenemos estas promesas, purifiquémonos de todo lo que mancha el cuerpo o el espíritu, perfeccionando nuestra consagración en el temor de Dios.
Considerad lo que esa tristeza querida por Dios ha producido en vosotros: qué solicitud, qué disculpas, qué indignación, qué temor, qué deseos, qué emulación, qué escarmiento. Demostrasteis ser totalmente inocentes en este asunto.
Los dirigentes no me añadieron nada -lo que ellos fueron antes, no me interesa, pues Dios no juzga por las apariencias-,
para que el Dios de nuestro Señor Jesucristo, el Padre de la gloria, os conceda espíritu de sabiduría que os revele un conocimiento profundo de él;
Y vosotros, amos, haced con ellos las mismas cosas, dejándoos de amenazas, considerando que ellos y vosotros tenéis un mismo amo en el cielo, para el que todos son iguales.
pues el Señor, vuestro Dios, es el Dios de los dioses y Señor de los señores, el Dios grande, fuerte y temible, que no admite acepción de personas ni se deja comprar con regalos.
Por tanto, queridos hermanos, como siempre habéis obedecido, no sólo durante mi presencia, sino también y mucho más mientras estuve ausente, trabajad por vuestra salvación con profundo acatamiento
Al que comete injusticia le darán la paga de sus injusticias, pues ante Dios todos somos iguales.
Así pues, puesto que entramos en posesión de un reino inmutable, retengamos firmemente la gracia, y por ella ofrezcamos a Dios un culto agradable con reverencia y con respeto.
Mientras sigue en vigor la promesa de entrar en su descanso, hay que tener mucho cuidado, no sea que alguno de vosotros no lo consiga.
Queridos hermanos, como a gente de paso en tierra extraña, os exhorto a que os abstengáis de las pasiones carnales, que hacen la guerra al espíritu.
Glorificad en vuestros corazones a Cristo, el Señor, dispuestos siempre a contestar a todo el que os pida razón de vuestra esperanza;