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Mateo 16:27 - Biblia Martin Nieto

27 Porque el hijo del hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles, y entonces dará a cada uno según sus obras.

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Biblia Reina Valera 1960

27 Porque el Hijo del Hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles, y entonces pagará a cada uno conforme a sus obras.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

27 Pues el Hijo del Hombre vendrá con sus ángeles en la gloria de su Padre y juzgará a cada persona de acuerdo con sus acciones.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

27 Sepan que el Hijo del Hombre vendrá con la gloria de su Padre, rodeado de sus ángeles, y entonces recompensará a cada uno según su conducta.

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La Biblia Textual 3a Edicion

27 Porque el Hijo del Hombre está al venir en la gloria de su Padre con sus ángeles,° y entonces recompensará a cada uno según su conducta.°

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

27 Porque el Hijo del hombre vendrá en la gloria de su Padre con sus ángeles, y entonces dará a cada uno conforme a su conducta.

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Mateo 16:27
45 Tagairtí Cros  

Pues él paga al hombre con arreglo a sus obras, retribuye a cada cual conforme a su conducta.


Dios ha dicho una cosa, y luego otra; yo lo he oído;


Si dices: 'Pero yo no lo sabía', el que pesa los corazones bien lo sabe, y el que vigila tu vida está informado; él dará a cada uno según sus obras.


Me dije: Dios juzgará al justo y al criminal, porque hay un tiempo para cada cosa y para cada acción aquí.


Yo, el Señor, escruto el corazón, sondeo las entrañas para dar a cada cual según su conducta, según el fruto de sus obras.


grande en tus consejos, poderoso en tus obras. Tus ojos están abiertos sobre todos los caminos de los humanos para retribuir a cada uno según su conducta y según el fruto de sus obras.


El que peca es el que morirá. El hijo no cargará con la culpa del padre, ni el padre con la del hijo. Al justo se le imputará su justicia y al injusto su injusticia.


El rey estará en duelo, el príncipe sumido en la desolación, las manos de la gente del pueblo temblarán. Yo los trataré según su proceder y los juzgaré según su manera de juzgar, y sabrán que yo soy el Señor'.


Un río de fuego manaba y salía delante de él. Miles de millares le servían, millones y millones estaban de pie en su presencia. El tribunal se sentó y los libros se abrieron.


Y se allanará el valle del Hinón, se allanará como se allanó a causa del terremoto en los días de Ozías, rey de Judá. Y vendrá el Señor, tu Dios, acompañado de todos sus santos.


El hijo del hombre enviará a sus ángeles, que recogerán de su reino a todos los que son causa de pecado y a todos los agentes de injusticias


Así será al fin del mundo. Vendrán los ángeles, separarán a los malos de los justos


Entonces aparecerá en el cielo la señal del hijo del hombre; todas las tribus de la tierra se golpearán el pecho y verán venir al hijo del hombre sobre las nubes del cielo con gran poder y majestad.


'Cuando venga el hijo del hombre en su gloria con todos sus ángeles se sentará sobre el trono de su gloria.


Jesús contestó: 'Tú lo has dicho. Y os declaro que desde ahora veréis al hijo del hombre sentado a la diestra del Padre y venir sobre las nubes del cielo'.


Jesús le dijo: 'Las raposas tienen madrigueras y las aves del cielo nidos, pero el hijo del hombre no tiene donde reclinar la cabeza'.


Jesús le dijo: '¡Yo soy!, y veréis al hijo del hombre sentado a la diestra del todopoderoso y venir entre las nubes del cielo'.


Porque si alguien se avergüenza de mí y de mi doctrina ante esta generación adúltera y pecadora, también el hijo del hombre se avergonzará de él cuando venga en la gloria de su Padre con los santos ángeles'.


Entonces verán al hijo del hombre venir en una nube con gran poder y majestad.


Pero desde ahora el hijo del hombre estará sentado a la derecha de Dios todopoderoso'.


Porque si alguien se avergüenza de mí y de mi doctrina, el hijo del hombre se avergonzará de él cuando venga con su gloria y con la del Padre y los santos ángeles.


Jesús le dijo: 'Si yo quiero que éste se quede hasta que yo venga, a ti ¿qué? Tú sígueme'.


Y entre los hermanos se corrió la voz de que aquel discípulo no moriría. Y no le dijo que no moriría, sino: 'Si quiero que él quede hasta que yo venga, a ti ¿qué?'.


que les dijeron: 'Galileos, ¿qué hacéis ahí mirando al cielo? Este Jesús que acaba de subir al cielo volverá tal como lo habéis visto irse al cielo'.


Por lo tanto, cada uno de nosotros tiene que dar cuenta a Dios de sí mismo.


el cual pagará a cada uno según sus obras:


Pero cada uno por su turno: el primero, Cristo; luego, cuando Cristo vuelva, los que son de Cristo.


El trabajo de cada uno aparecerá claro el día del juicio, porque ese día se manifestará con fuego, y el fuego probará la obra de cada uno.


No es la comida la que nos acerca a Dios. Por comer o por no comer, no somos ni menos ni más.


pues todos debemos comparecer ante el tribunal de Cristo, para que cada cual reciba lo que mereció durante su vida mortal, conforme a lo que hizo, bueno o malo.


considerando que el Señor retribuirá a cada uno todo el bien que haga, lo mismo al esclavo que al libre.


Al que comete injusticia le darán la paga de sus injusticias, pues ante Dios todos somos iguales.


con la esperanza de que su Hijo Jesús, al que él resucitó de entre los muertos, vuelva del cielo y nos libre del desastre inminente.


Porque el Señor mismo, a la señal dada por la voz del arcángel y al son de la trompeta de Dios, bajará del cielo, y los muertos unidos a Cristo resucitarán los primeros.


Tened paciencia, hermanos, hasta la venida del Señor. Ved cómo el labrador espera el precioso fruto de la tierra, aguardando pacientemente hasta que caigan las lluvias tempranas y las tardías.


Y si invocáis como Padre al que juzga imparcialmente a cada uno según sus obras comportaos respetuosamente mientras estáis de paso en este mundo.


Ahora, hijos míos, permaneced unidos a Cristo, para que, cuando él venga, podamos sentirnos seguros y no nos avergoncemos de encontrarnos lejos de él en su venida.


Ya profetizó de ellos Henoc, séptimo patriarca después de Adán, diciendo: Mirad, el Señor viene con miles y miles de ángeles


Miradlo, viene entre nubes; lo verán todos, aun los que lo traspasaron, y se lamentarán sobre él todas las naciones de la tierra. Sí. Amén.


y a sus hijos los voy a herir de muerte; de este modo todas las Iglesias sabrán que soy yo el que penetra los sentimientos y los pensamientos, y os daré a cada uno según sus obras.


Vi los muertos, grandes y pequeños, en pie delante del trono; entonces fueron abiertos los libros; fue abierto también otro libro, el libro de la vida. Y los muertos fueron juzgados según el contenido de los libros, cada uno según sus obras.


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