Haré de ti un gran pueblo, te bendeciré, haré famoso tu nombre, y servirá de bendición.
Números 22:12 - Nueva Biblia Española (1975) Dios dijo a Balaán: No vayas con ellos ni maldigas a ese pueblo, que es bendito. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Entonces dijo Dios a Balaam: No vayas con ellos, ni maldigas al pueblo, porque bendito es. Biblia Nueva Traducción Viviente Pero Dios le dijo a Balaam: —No vayas con ellos ni maldigas a este pueblo, ¡porque es bendito! Biblia Católica (Latinoamericana) Pero Dios dijo a Balaam: 'No irás con ellos ni maldecirás a ese pueblo, porque está bendito. La Biblia Textual 3a Edicion Entonces ’Elohim dijo a Balaam: No irás con ellos ni maldecirás al pueblo, porque él es bendito. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Pero Dios dijo a Balaán: 'No vayas con ellos ni maldigas a ese pueblo, porque está bendecido'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces dijo Dios a Balaam: No vayas con ellos, ni maldigas al pueblo; porque es bendito. |
Haré de ti un gran pueblo, te bendeciré, haré famoso tu nombre, y servirá de bendición.
El sumo sacerdote, Azarías, de la familia de Sadoc, le dijo: Desde que comenzaron a traer ofrendas al templo hemos comido hasta saciarnos; pero ha sobrado mucho porque el Señor ha bendecido a su pueblo. Toda esta cantidad es lo que ha sobrado.
¡Dichoso el pueblo que esto tiene, dichoso el pueblo cuyo Dios es el Señor!
Dichoso a quien auxilia el Dios de Jacob, el que espera en el Señor, su Dios,
Su estirpe será célebre entre las naciones, y sus vástagos entre los pueblos. Los que los vean reconocerán que son la estirpe que bendijo el Señor.
Pueblo mío, recuerda lo que maquinaba Balac, rey de Moab, y cómo respondió Balaán, hijo de Beor; recuerda desde Acacias a Guilgal, para que comprendas que el Señor tiene razón.
“Un pueblo ha salido de Egipto que cubre la superficie de la tierra; ven pronto a maldecírmelos, a ver si logro pelear con ellos y expulsarlos'.
Balaán se levantó a la mañana siguiente y dijo a los ministros de Balac: Vuelvan a su tierra, pues el Señor no me deja ir con ustedes.
Ven, por favor, a maldecirme a ese pueblo, que me excede en número, a ver si logro derrotarlo y expulsarlo de la región. Pues sé que el que tú bendices queda bendecido y el que tú maldices queda maldecido.
No valen presagios contra Jacob ni conjuros contra Israel; el tiempo dirá a Jacob y a Israel lo que ha hecho Dios.
Después Balaán dijo a Balac: Quédate junto a los holocaustos mientras yo voy a ver si el Señor me sale al encuentro. Lo que él me manifieste, te lo comunicaré. Y se fue a una altura pelada.
¿Puedo maldecir a quien no maldice Dios, puedo fulminar a quien no fulmina el Señor?
Se agazapa y se tumba como un león, o como una leona, ¿quién lo desafiará? Bendito quien te bendiga, maldito quien te maldiga'.
Mientras estaba sentado en el tribunal, su mujer le mandó recado: Deja en paz a ese inocente, que esta noche he sufrido mucho en sueños por causa suya.
¡Bendito sea Dios, Padre de nuestro Señor, Jesús Mesías, que, por medio del Mesías, nos ha bendecido desde el cielo con toda bendición del Espíritu!
Pues el Señor, tu Dios, te ha bendecido en todas tus empresas, los ha atendido en el viaje por ese inmenso desierto; durante los últimos cuarenta años el Señor, tu Dios ha estado contigo y no te ha faltado nada'.
(aunque el Señor, tu Dios, no hizo caso a Balaán, el Señor, tu Dios, cambió la maldición en bendición, porqué te amaba el Señor, tu Dios).
¡Felicidades, Israel! ¿Quién como tú? Pueblo salvado por el Señor, su escudo protector y espada victoriosa. Tus enemigos te adularán y tú pisarás sus espaldas'.
Serás bendito entre todos los pueblos; no habrá estéril ni impotente entre los tuyos ni en tu ganado.