Elías se acercó a la gente y dijo: ¿Hasta cuándo van a caminar con. muletas? Si el Señor es el verdadero Dios, síganlo; si lo es Baal, sigan a Baal. La gente no respondió una palabra.
Jeremías 7:9 - Nueva Biblia Española (1975) ¿de modo que roban, matan, cometen adulterio, juran en falso, queman incienso a Baal, siguen a dioses extranjeros y desconocidos, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Hurtando, matando, adulterando, jurando en falso, e incensando a Baal, y andando tras dioses extraños que no conocisteis, Biblia Nueva Traducción Viviente ¿De verdad piensan que pueden robar, matar, cometer adulterio, mentir y quemar incienso a Baal y a los otros nuevos dioses que tienen, Biblia Católica (Latinoamericana) Ustedes roban, matan, toman la esposa del prójimo, juran en falso u ofrecen sacrificios a otros dioses, que no son de ustedes... La Biblia Textual 3a Edicion Robando, asesinando y adulterando, y jurando en falso, y quemando incienso a Baal, y andando tras otros dioses que no habíais conocido, Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¡Cómo! ¡Conque robáis, matáis, cometéis adulterio, juráis en falso, incensáis a Baal, vais tras otros dioses que no conocéis, Biblia Reina Valera Gómez (2023) ¿Seguiréis hurtando, matando, adulterando, jurando falsamente, y quemando incienso a Baal, y andando tras dioses ajenos que no conocisteis? |
Elías se acercó a la gente y dijo: ¿Hasta cuándo van a caminar con. muletas? Si el Señor es el verdadero Dios, síganlo; si lo es Baal, sigan a Baal. La gente no respondió una palabra.
No me traigan más dones vacíos, más incienso execrable. Novilunios, sábados, asambleas... no aguanto reuniones y crímenes.
Consultan mi oráculo a diario, muestran deseo de conocer mi camino, como un pueblo que practicara la justicia y no abandonara el mandato de su Dios. Me piden sentencias justas, desean tener cerca a Dios.
Entablaré pleito con ellos por todas sus maldades: porque me abandonaron, quemaron incienso a dioses extranjeros y se postraron ante las obras de sus manos.
Tenías tantos dioses como poblados, Judá; hiciste tantos altares como calles, Jerusalén; altares para ofrecer sacrificios a Baal.
El Señor de los ejércitos, que te plantó, pronuncia una amenaza contra ti, por la maldad de Israel y de Judá, que me irritaron quemando incienso a Baal.
de ese pueblo que se niega a obedecerme, que se porta obstinadamente, que sigue a dioses extranjeros y les rinde adoración. Serán como ese cinturón inservible.
Pues mi pueblo me olvida y sacrifica a una ficción; tropiezan caminando por las viejas veredas y caminan por sendas y caminos sin aplanar,
porque me abandonaron, extrañaron este lugar sacrificando en él a dioses extranjeros, que ni ellos ni sus padres conocían, y los reyes de Judá lo llenaron de sangre inocente.
Los caldeos que la atacan entrarán en esta ciudad y le pondrán fuego. La quemarán con las casas, en cuyas azoteas se quemaba incienso a Baal y se hacían libaciones a dioses extranjeros, para irritarme.
A causa de las maldades que cometieron, irritándome, quemando incienso y dando culto a dioses extraños, que ni ellos ni sus padres conocían.
y me irritan con las obras de sus manos, quemando incienso a dioses extraños en Egipto, donde han venido a residir; y así son extirpados y se convierten en maldición y oprobio de todas las naciones del mundo?
¿Han olvidado las maldades de sus padres, de los reyes de Judá y sus mujeres, las maldades de ustedes y las de sus mujeres cometidas en Judá y en las calles de Jerusalén?
Acabaré en Moab con los que suben a las ermitas a ofrecer incienso a sus dioses -oráculo del Señor- .
Después de todo, ¿podré perdonarte?, tus hijos me abandonaron, juraron por dioses falsos; yo los sacié, ellos fueron adúlteros, se iban en tropel a los prostíbulos;
si no explotan al emigrante, al huérfano y a la viuda, si no derraman sangre inocente en este lugar, si no siguen a dioses extranjeros, para su mal,
Su padre, que cometió atropellos y robos y maltrató a su gente, murió por su culpa.
Por tanto, dile a la casa de Israel: Esto dice el Señor: Se contaminan igual que sus padres, fornican con sus fetiches,
Después de degollar a sus hijos en honor de sus ídolos, entraron en mi santuario profanándolo. Ahí tienes lo que hicieron dentro de mi casa.
Por eso, ¡por mi vida! -oráculo del Señor- , por haber profanado mi santuario con tus ídolos y abominaciones, juro que te rechazaré, no me apiadaré de ti ni te perdonaré.
Le tomaré cuentas de cuando ofrecía incienso a los baales y se endomingaba con aretes y gargantillas para ir con sus amantes, olvidándose de mí -oráculo del Señor- .
Como bandidos al acecho se confabulan los sacerdotes; asesinan camino de Siquén, perpetran villanías.
ofrezcan ázimos, pronuncien la acción de gracias, anuncien dones voluntarios, que eso es lo que les gusta, israelitas -oráculo del Señor- .
a los que adoran en las azoteas el ejército del cielo, a los que adorando al Señor y jurando por él, juran también por Moloc,
Los llamaré a juicio, seré testigo exacto contra hechiceros, adúlteros y perjuros, contra los que defraudan al obrero de su jornal, oprimen a viudas y huérfanos y atropellan al emigrante sin tenerme respeto -dice el Señor de los ejércitos-.
Pero, ¡sabemos que Dios condena con razón a los que obran de ese modo!
ofrecieron víctimas a demonios que no son dios, a dioses desconocidos, nuevos, importados de cerca, que no veneraban sus padres.
En cambio, a los cobardes, infieles, infames, asesinos, lujuriosos, hechiceros e idólatras y a todos los embusteros les tocará en suerte el lago de azufre ardiendo, que es la segunda muerte.
Fuera los perros, los hechiceros, los lujuriosos, los asesinos, los idólatras y todo amigo de falsedades'.
Se había escogido dioses nuevos: ya la guerra llegaba a las puertas; ni un escudo ni una lanza se veían entre cuarenta mil israelitas.