cuando se terminaron los víveres que habían traído de Egipto, su padre les dijo: Vuelvan a comprarnos provisiones.
Génesis 43:3 - Nueva Biblia Española (1975) Judá le contestó: Aquel hombre nos ha jurado: 'No se presenten ante mí si no me traen a su hermano'. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Respondió Judá, diciendo: Aquel varón nos protestó con ánimo resuelto, diciendo: No veréis mi rostro si no traéis a vuestro hermano con vosotros. Biblia Nueva Traducción Viviente Pero Judá dijo: —El hombre hablaba en serio cuando nos advirtió: “No volverán a ver mi rostro a menos que su hermano venga con ustedes”. Biblia Católica (Latinoamericana) Judá le contestó: 'Aquel hombre nos dijo bien claro que no nos admitiría en su presencia si no iba con nosotros nuestro hermano. La Biblia Textual 3a Edicion Y Judá le respondió, diciendo: Aquel hombre nos advirtió seriamente, diciendo: No veréis mi rostro a menos que vuestro hermano venga con vosotros. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Judá le contestó: 'Aquel hombre nos advirtió categóricamente: 'No os admitiré en mi presencia si vuestro hermano no viene con vosotros'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y respondió Judá, diciendo: Aquel varón nos protestó con ánimo resuelto, diciendo: No veréis mi rostro a menos que vuestro hermano venga con vosotros. |
cuando se terminaron los víveres que habían traído de Egipto, su padre les dijo: Vuelvan a comprarnos provisiones.
Si permites a nuestro hermano venir con nosotros, bajaremos a comprarte provisiones;
si no lo dejas, no bajaremos, pues aquel hombre nos dijo: 'No se presenten ante mí si no me traen a su hermano'.
Tú dijiste a tus siervos: 'Si no baja su hermano menor con ustedes, no volverán a verme'.
El rey ordenó: Que se vaya a su casa, porque no quiero recibirlo. Absalón volvió a su casa, sin ser recibido por el rey.
Absalón contestó: Mira, mandé a decirte que vinieras para enviarte al rey con este mensaje: '¿Para qué he vuelto de Guesur? ¡Mejor estaba allí! Quiero que el rey me reciba, y si soy culpable, que me mate'.
David respondió: Está bien. Yo haré un pacto contigo. Sólo te exijo una cosa: cuando vengas a verme, no te recibiré si no me traes a Mical, hija de Saúl.
Y ahora miren, yo sé que ninguno de ustedes, entre quienes he predicado el reino, volverá a verme.
lo que más pena les daba era lo que había dicho de que no volverían a verlo. Luego lo acompañaron hasta el barco.
He visto lo que sufre mi pueblo en Egipto, he escuchado su gemido y he bajado a librarlos. Ahora ven acá, que te voy a enviar a Egipto”'.