Lot echó una mirada y vio que toda la vega del Jordán, hasta la entrada de Zoar, era de regadío (esto era antes de que el Señor destruyera a Sodoma y Gomorra); parecía un jardín divino, o como Egipto.
Génesis 2:8 - Nueva Biblia Española (1975) El Señor Dios plantó un parque en Edén, hacia oriente, y colocó en él al hombre que había modelado. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y Jehová Dios plantó un huerto en Edén, al oriente; y puso allí al hombre que había formado. Biblia Nueva Traducción Viviente Después, el Señor Dios plantó un huerto en Edén, en el oriente, y allí puso al hombre que había formado. Biblia Católica (Latinoamericana) Yavé Dios plantó un jardín en un lugar del Oriente llamado Edén, y colocó allí al hombre que había formado. La Biblia Textual 3a Edicion Y plantó YHVH ’Elohim un huerto en Edén, al oriente, y puso allí al hombre que había formado. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Plantó Yahveh-Dios un jardín en Edén, al oriente, y puso allí al hombre que había formado. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y Jehová Dios plantó un huerto en Edén, al oriente, y puso allí al hombre que había formado. |
Lot echó una mirada y vio que toda la vega del Jordán, hasta la entrada de Zoar, era de regadío (esto era antes de que el Señor destruyera a Sodoma y Gomorra); parecía un jardín divino, o como Egipto.
Y el Señor Dios lo expulsó del paraíso, para que labrara la tierra de donde lo había sacado.
Echó al hombre, y a oriente del parque de Edén colocó a los querubines y la espada llameante que oscilaba, para cerrar el camino del árbol de la vida.
Caín salió de la presencia del Señor y habitó en Tierra Perdida, al este de Edén.
¿Los salvaron a ellos los dioses de los pueblos que destruyeron mis predecesores: Gozan, Jarán, Résef, y los adanitas de Telasar?
El Señor consuela a Sión, consuela a sus ruinas: convertirá su desierto en un edén, su yermo en paraíso del Señor; allí habrá gozo y alegría, con acción de gracias al son de instrumentos.
estabas en un jardín de dioses, revestido de piedras preciosas: cornalina, topacio y aguamarina, crisólito, malaquita y jaspe, zafiro, rubí y esmeralda; de oro afiligranado tus zarcillos y dijes, preparados el día de tu creación.
Al estruendo de su caída hice temblar a las naciones, cuando lo precipité en el Abismo con los que bajan a la fosa; entonces se consolaron en lo profundo de la tierra los árboles del paraíso, la gala del Líbano, los bien regados.
¿Con qué árbol del paraíso competías en gloria y en grandeza? Fuiste precipitado con los árboles del paraíso a lo profundo de la tierra: yaces en medio de incircuncisos, con los muertos a espada. Se trata del Faraón y de su tropa -oráculo del Señor- .
En vanguardia el fuego devora, las llamas abrasan en retaguardia; delante la tierra es un vergel, detrás es una estepa desolada; nada se salva.