2 Corintios 4:16 - Nueva Biblia Española (1975) Por esta razón no nos acobardamos; no, aunque nuestro exterior va decayendo, lo interior se renueva de día en día; Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Por tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día. Biblia Nueva Traducción Viviente Es por esto que nunca nos damos por vencidos. Aunque nuestro cuerpo está muriéndose, nuestro espíritu va renovándose cada día. Biblia Católica (Latinoamericana) Por eso no nos desanimamos; al contrario, aunque nuestro exterior está decayendo, el hombre interior se va renovando de día en día en nosotros. La Biblia Textual 3a Edicion Por tanto, no desmayamos; más bien, aunque nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior, no obstante, es renovado de día en día. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Y, por eso, no perdemos el ánimo sino todo lo contrario. Pues aun cuando nuestro hombre exterior se va desmoronando, nuestro hombre interior se va renovando día tras día. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Por tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día. |
Oh Dios, crea en mí un corazón puro, renuévame por dentro con espíritu firme;
Aunque se consuman mi espíritu y mi carne, Dios es la roca de mi espíritu, mi lote perpetuo.
pero los que esperan en el Señor renuevan sus fuerzas, echan alas como las águilas, corren sin cansarse, marchan sin fatigarse.
Tú dices: i Ay de mí!, que el Señor añade penas a mi dolor; me canso de gemir y no encuentro reposo.
y no se amolden al mundo éste, sino váyanse transformando con la nueva mentalidad, para ser ustedes capaces de distinguir lo que es la voluntad de Dios, lo bueno, conveniente y acabado.
Por consiguiente, queridos hermanos, estén firmes e inconmovibles, trabajando cada vez más por el Señor, sabiendo que sus fatigas como cristianos no son inútiles.
Por mi parte, con muchísimo gusto gastaré, y me desgastaré yo mismo por ustedes. Los quiero demasiado. ¿Es una razón para que me quieran menos?
Por eso, encargados de este servicio por misericordia de Dios, no nos acobardamos;
y le pido que, mostrando su inagotable esplendidez, los refuerce y fortalezca interiormente con su Espíritu,
y se vistieron de ese hombre nuevo que por el conocimiento se va renovando a imagen de su Creador;
y entonces, no en base a las buenas obras que hubiéramos hecho, sino por su misericordia, nos salvó con el baño regenerador y renovador, con el Espíritu Santo que Dios
sino la personalidad escondida dentro, con el adorno inalterable de un carácter suave y sereno. Esto sí que vale a los ojos de Dios.
Si los escarnecen por ser cristianos, dichosos ustedes; eso indica que el Espíritu de la gloria, que es el de Dios, reposa sobre ustedes.