Jesús se acercó entonces a ellos y les dijo: ―Se me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra.
Mateo 11:27 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) »Mi Padre me ha entregado todas las cosas. Nadie conoce al Hijo, sino el Padre, y nadie conoce al Padre, sino el Hijo y aquel a quien el Hijo quiera revelarlo. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Todas las cosas me fueron entregadas por mi Padre; y nadie conoce al Hijo, sino el Padre, ni al Padre conoce alguno, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quiera revelar. Biblia Nueva Traducción Viviente »Mi Padre me ha confiado todo. Nadie conoce verdaderamente al Hijo excepto el Padre, y nadie conoce verdaderamente al Padre excepto el Hijo y aquellos a quienes el Hijo decide revelarlo». Biblia Católica (Latinoamericana) Nadie conoce al Hijo sino el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquellos a quienes el Hijo se lo quiera dar a conocer. La Biblia Textual 3a Edicion Todas las cosas me fueron entregadas por mi Padre.° Nadie conoce plenamente al Hijo sino el Padre, y nadie conoce plenamente al Padre sino el Hijo,° y aquel a quien el Hijo lo quiera revelar. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Todo me lo ha confiado mi Padre. Y nadie conoce al Hijo sino el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo quiera revelárselo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Todas las cosas me son entregadas por mi Padre; y nadie conoce al Hijo, sino el Padre, ni nadie conoce al Padre, sino el Hijo, y aquel a quien el Hijo lo quisiere revelar. |
Jesús se acercó entonces a ellos y les dijo: ―Se me ha dado toda autoridad en el cielo y en la tierra.
»Mi Padre me ha entregado todas las cosas. Nadie sabe quién es el Hijo, sino el Padre, y nadie sabe quién es el Padre, sino el Hijo y aquel a quien el Hijo quiera revelarlo».
A Dios nadie lo ha visto nunca. El Hijo único, que es Dios, nos lo ha dado a conocer, pues vive en unión íntima con el Padre.
así como el Padre me conoce a mí y yo lo conozco a él. Yo doy mi vida por las ovejas.
Jesús sabía que el Padre había puesto todas las cosas bajo su dominio. También sabía que había salido de Dios y a él volvía.
»A los que me diste del mundo les he revelado tu nombre. Eran tuyos; tú me los diste y ellos han obedecido tu palabra.
Al Padre nadie lo ha visto, excepto el que viene de Dios; solo él ha visto al Padre.
pero yo sí lo conozco porque vengo de parte suya. Es él quien me ha enviado.
Él subió al cielo y tomó su lugar a la derecha de Dios, y los ángeles y los espíritus con autoridad y poder lo obedecen.
Todo el que rechaza al Hijo rechaza también al Padre; el que acepta al Hijo también acepta al Padre.
Todo el que se desvía de la enseñanza de Cristo y no la obedece se aleja de Dios. En cambio, el que la obedece se acerca más al Padre y al Hijo.