Sí, ustedes, que recibieron la Ley que fue dada por medio de ángeles, pero que no la han obedecido».
Hebreos 2:2 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento) Los ángeles fueron los encargados de anunciar la Ley, y toda desobediencia y pecado recibió su justo castigo. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Porque si la palabra dicha por medio de los ángeles fue firme, y toda transgresión y desobediencia recibió justa retribución, Biblia Nueva Traducción Viviente Pues el mensaje que Dios transmitió mediante los ángeles se ha mantenido siempre firme, y toda infracción de la ley y todo acto de desobediencia recibió el castigo que merecía. Biblia Católica (Latinoamericana) Miren cuán inflexible era la Ley entregada por los ángeles, pues toda falta o desobediencia recibía su castigo. La Biblia Textual 3a Edicion Porque si la palabra hablada por medio de ángeles fue firme, y toda transgresión y desobediencia recibió justa retribución, Biblia Serafín de Ausejo 1975 Porque, si la palabra pronunciada por medio de ángeles resultó válida, hasta el punto de que toda transgresión y desobediencia recibió su justo merecido, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Porque si la palabra dicha por los ángeles fue firme, y toda transgresión y desobediencia recibió justa retribución, |
Sí, ustedes, que recibieron la Ley que fue dada por medio de ángeles, pero que no la han obedecido».
Entonces, ¿cuál era el propósito de la Ley? La Ley nos fue dada luego de la promesa para que conociéramos nuestros pecados. Ese sería su propósito hasta que viniera aquel al cual se refiere la promesa. Dios le entregó la Ley a Moisés por medio de ángeles, para que él se la diera al pueblo.
Dios habló en otras épocas a nuestros antepasados. Lo hizo por medio de los profetas en diversas ocasiones y de varias maneras.
Cualquiera que rechazaba la Ley de Moisés moría sin compasión si dos o tres testigos declaraban que había desobedecido.
Así que no pierdan la confianza, porque esta será grandemente recompensada.
Consideró que sufrir por ser fiel al Cristo que vendría era mucho mejor que los tesoros de Egipto. Es que tenía la mirada puesta en la recompensa.
En realidad, sin fe es imposible agradar a Dios. Para acercarse a Dios hay que creer que él existe y que recompensa a quienes lo buscan.
Tengan cuidado de no rechazar al Dios que les habla. Recuerden que los que lo rechazaron no escaparon de su castigo en la tierra. Así que mucho menos escaparemos nosotros si le volvemos la espalda al que nos habla desde el cielo.
Esto ha venido a confirmar que el mensaje de los profetas era cierto. Su mensaje es como una lámpara que brilla en un lugar oscuro. Y ese mensaje continuará alumbrando su manera de vivir hasta que Cristo vuelva. Será como una luz que en la noche alumbra hasta que llegue el día y salga la estrella de la mañana. Por eso, ustedes harán bien en prestarle atención a ese mensaje.
Quiero recordarles algo que ustedes ya saben muy bien: que el Señor, después de sacar de Egipto a su pueblo, destruyó a los que no creyeron.