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Gálatas 3:20 - Nueva Versión Internacional 2019 (simplificada - Nuevo Testamento)

Ahora bien, Dios es uno solo y, cuando le dio la promesa a Abraham, no envió a nadie para entregarla. Se la dio personalmente.

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Más versiones

Biblia Reina Valera 1960

Y el mediador no lo es de uno solo; pero Dios es uno.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Ahora bien, un mediador es de ayuda si dos o más partes tienen que llegar a un acuerdo, pero Dios —quien es uno solo— no usó ningún mediador cuando le dio la promesa a Abraham.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

(no se hablaría de un mediador si hubiera una sola parte, y Dios es uno solo).

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La Biblia Textual 3a Edicion

y el mediador no es de uno solo, pero Dios es uno solo.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Pero cuando sólo hay uno, no hay el mediador y Dios es uno solo.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Ahora bien, un mediador no es de uno solo, pero Dios es uno.

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Otras versiones



Gálatas 3:20
11 Referencias Cruzadas  

Herodes estaba furioso con los de Tiro y de Sidón. Por eso, algunos de ellos se pusieron de acuerdo y se presentaron ante él. Se ganaron el favor de Blasto, camarero del rey, y por medio de él pidieron paz. Y es que Tiro y Sidón compraban sus alimentos en el país del rey Herodes.


Lo que quiero decir es esto: La Ley, que vino cuatrocientos treinta años después, no elimina el pacto que Dios ya había confirmado. Si lo hubiera hecho, la promesa no tendría valor.


Porque hay un solo Dios y solo hay uno que puede ponernos en paz con Dios, y ese es Jesucristo. Él es el hombre


Han llegado hasta Jesús, y por medio de él Dios ha hecho un nuevo pacto con ustedes. Y todo gracias a la sangre que él derramó al morir. Esa sangre es mejor que la de Abel, porque su sangre pide venganza, pero la de Jesús ofrece perdón.


Pero el trabajo sacerdotal que Jesús ha recibido es superior al de ellos. De igual manera, el pacto que Dios ha hecho con nosotros por medio de Jesús es superior al antiguo, ya que se basa en mejores promesas.


Por eso Dios ha hecho un nuevo pacto con nosotros por medio de Cristo. Pues él ha muerto para liberarnos de los pecados cometidos bajo el primer pacto. Así ha hecho posible que los llamados por Dios reciban la salvación eterna que les había prometido.