Entonces Ben Adad le envió otro mensaje a Acab: «Que los dioses me castiguen sin piedad si queda en Samaria el polvo suficiente para que mis hombres se lleven un puñado».
2 Samuel 17:12 - Biblia Nueva Versión Internacional 2022 Atacaremos a David, no importa dónde se encuentre; caeremos sobre él como el rocío que cae sobre la tierra. No quedarán vivos ni él ni ninguno de sus soldados. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Entonces le acometeremos en cualquier lugar en donde se hallare, y caeremos sobre él como cuando el rocío cae sobre la tierra, y ni uno dejaremos de él y de todos los que están con él. Biblia Nueva Traducción Viviente Cuando encontremos a David, caeremos sobre él como el rocío que cae sobre la tierra. De este modo ni él ni ninguno de sus hombres quedarán con vida. Biblia Católica (Latinoamericana) Lo atacaremos, esté donde esté, nos dejaremos caer sobre él tal como cae el rocío en el suelo y no dejaremos con vida ni a él ni a sus compañeros. La Biblia Textual 3a Edicion De esta suerte iremos contra él en algún lugar, dondequiera que se halle, y caeremos° sobre él como el rocío cae sobre la tierra; y no sobrevivirá nadie; ni él ni ninguno de todos los hombres que están con él. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Iremos contra él adondequiera que se encuentre, y caeremos sobre él como cae el rocío sobre la tierra; no dejaremos con vida ni a él ni a ninguno de los que le acompañan. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces le acometeremos en cualquier lugar que pudiere hallarse, y daremos sobre él como cuando el rocío cae sobre la tierra, y ni uno dejaremos de él, y de todos los que con él están. |
Entonces Ben Adad le envió otro mensaje a Acab: «Que los dioses me castiguen sin piedad si queda en Samaria el polvo suficiente para que mis hombres se lleven un puñado».
»Ahora bien, Ezequías, haz este trato con mi señor, el rey de Asiria: Yo te doy dos mil caballos si tú consigues otros tantos jinetes para montarlos.
Cavé pozos en tierras extranjeras y en esas aguas apagué mi sed. Con las plantas de mis pies sequé todos los ríos de Egipto”.
Tus tropas estarán dispuestas cuando manifiestes tu poder, ordenadas en santa majestad. De las entrañas de la aurora recibirás el rocío de tu juventud.
La soberbia de tu corazón te ha engañado. Como habitas en las hendiduras de las rocas, en la altura de tu morada, te engañas a ti mismo, diciendo: ¿Quién podrá arrojarme a tierra?
El remanente de Jacob será, en medio de muchos pueblos, como rocío que viene del Señor, como abundante lluvia sobre la hierba, que no depende de los hombres ni espera nada de ellos.
Infórmense bien de todos los lugares donde se esconde y tráiganme datos precisos. Entonces yo iré con ustedes y, si es verdad que está en esa región, lo buscaré entre todos los clanes de Judá.