Luego dijo a sus discípulos: 'El que quiera venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame.
Juan 21:22 - Biblia Martin Nieto Jesús le dijo: 'Si yo quiero que éste se quede hasta que yo venga, a ti ¿qué? Tú sígueme'. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 Jesús le dijo: Si quiero que él quede hasta que yo venga, ¿qué a ti? Sígueme tú. Biblia Nueva Traducción Viviente Jesús contestó: —Si quiero que él siga vivo hasta que yo regrese, ¿qué tiene que ver contigo? En cuanto a ti, sígueme. Biblia Católica (Latinoamericana) Jesús le contestó: 'Si yo quiero que permanezca hasta mi vuelta, ¿a ti qué te importa? Tú sígueme. La Biblia Textual 3a Edicion Jesús le dice: Si quiero que él quede hasta que Yo venga,° ¿a ti, qué? Tú, sígueme. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Le responde Jesús: 'Si quiero que éste permanezca hasta que yo vuelva, ¿a ti, qué? Tú sígueme'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Jesús le dijo: Si quiero que él quede hasta que yo venga, ¿qué a ti? Tú sígueme. |
Luego dijo a sus discípulos: 'El que quiera venir en pos de mí, niéguese a sí mismo, tome su cruz y sígame.
Porque como el relámpago sale del oriente y brilla hasta el occidente, así será la venida del hijo del hombre.
Estando él sentado en el monte de los Olivos, fueron los discípulos y le preguntaron a solas: 'Dinos, ¿cuándo sucederá eso y cuál será la señal de tu venida y del fin del mundo?'.
Estad preparados también vosotros, porque a la hora que menos penséis vendrá el hijo del hombre'.
'Cuando venga el hijo del hombre en su gloria con todos sus ángeles se sentará sobre el trono de su gloria.
Y les decía: 'Os aseguro que algunos de los presentes no morirán sin haber visto venir el reino de Dios con poder'.
Dijo esto para indicar con qué muerte iba a glorificar a Dios. Después añadió: '¡Sígueme!'.
Pues siempre que coméis este pan y bebéis este cáliz anunciáis la muerte del Señor hasta que vuelva.
Así pues, nada juzguéis antes de tiempo, hasta que venga el Señor, que iluminará los escondrijos de las tinieblas y pondrá de manifiesto las intenciones del corazón, y entonces cada uno recibirá de Dios la alabanza que merezca.
Y es que, ¿quién es en verdad nuestra esperanza, nuestro gozo, nuestra corona de gloria delante de nuestro Señor Jesucristo en el día de su venida? ¿Quién sino vosotros?
Tened paciencia, hermanos, hasta la venida del Señor. Ved cómo el labrador espera el precioso fruto de la tierra, aguardando pacientemente hasta que caigan las lluvias tempranas y las tardías.
Aguardad también vosotros pacientemente; fortaleced vuestros ánimos, porque la venida del Señor está próxima.
Miradlo, viene entre nubes; lo verán todos, aun los que lo traspasaron, y se lamentarán sobre él todas las naciones de la tierra. Sí. Amén.
El que afirma estas cosas dice: 'Sí, yo voy a llegar en seguida'. Amén. ¡Ven, Señor Jesús!
Voy a llegar en seguida. Dichoso el que guarda la palabra de la profecía de este libro'.
Mi venida está próxima; guarda bien lo que tienes, para que nadie te quite tu corona.