Esforzaos para entrar por la puerta angosta, porque os digo que muchos procurarán entrar y no podrán.
Colosenses 1:29 - La Biblia Textual 3a Edicion en lo cual también me fatigo, luchando conforme a su potencia, la cual actúa poderosamente en mí. Más versionesBiblia Reina Valera 1960 para lo cual también trabajo, luchando según la potencia de él, la cual actúa poderosamente en mí. Biblia Nueva Traducción Viviente Es por eso que trabajo y lucho con tanto empeño, apoyado en el gran poder de Cristo que actúa dentro de mí. Biblia Católica (Latinoamericana) Este es mi trabajo, al que me entrego con la energía que viene de Cristo y que obra poderosamente en mí. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Para ello, precisamente, estoy yo trabajando y luchando según la acción con que él actúa en mí con todo su poder. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Por lo cual también trabajo, luchando según su poder, el cual obra poderosamente en mí. Biblia Traducción en Lenguaje Actual Para esto trabajo y lucho con la fuerza y el poder que Cristo me da. |
Esforzaos para entrar por la puerta angosta, porque os digo que muchos procurarán entrar y no podrán.
y así esforzándome de esta manera a predicar las buenas nuevas, no donde el Mesías fuera ya conocido,° para no edificar sobre fundamento ajeno;
Os ruego por nuestro Señor Jesús el Mesías y por el amor del Espíritu, que me ayudéis en las oraciones por mí ante Dios,
Pero todas estas cosas las efectúa el único y el mismo Espíritu, repartiendo en particular a cada uno como Él quiere.°
y hay diversidad de actividades, pero Dios, que efectúa° todas las cosas en todos, es el mismo.
Pero por la gracia de Dios soy lo que soy, y su gracia hacia mí no ha sido en vano;° al contrario, trabajé más que todos ellos, pero no yo, sino la gracia de Dios conmigo.
¿Son ministros del Mesías? (Hablo como si hubiera perdido el juicio.) Yo más: en trabajos, mucho más; en cárceles,° mucho más; en azotes, más severamente; en peligros de muerte, muchas veces.
puesto que buscáis una evidencia del Mesías que habla en mí, el cual no es débil para con vosotros, sino que es poderoso en vosotros.
Por lo cual también procuramos, ya presentes, o ausentes, serle agradables,
en azotes, en cárceles,° en tumultos, en trabajos fatigosos, en desvelos, en días sin comer,
y cuál la inmensurable grandeza de su poder para con nosotros los que creemos, por la acción soberana de su fuerza,
Y al que puede hacer todas las cosas mucho más abundantemente y más allá° de lo que pedimos o entendemos, según el poder que actúa en nosotros,
del cual fui hecho ministro según el don° de la gracia de Dios que me fue dada conforme a la eficacia de su poder.
Solamente que os comportéis° de una manera digna del evangelio del Mesías, para que, ya sea que vaya y os vea, ya sea que estando ausente, oiga acerca de vosotros que estáis firmes en un mismo espíritu, unánimes, combatiendo juntos por la fe del evangelio;
teniendo vosotros el mismo conflicto que visteis en mí,° y ahora oís que está en mí.
Porque Dios es el que activa° en vosotros tanto el querer como el hacer, por su buena voluntad.
aferrados a la palabra de vida, para gloria mía en el día del Mesías de que no corrí en vano, ni en vano me fatigué.
Porque quiero que sepáis cuán grande lucha tengo por vosotros, y por los que están en Laodicea, y por todos los que no han visto mi rostro;°
sepultados juntamente con Él en el bautismo, en el cual también fuisteis resucitados con Él, por medio de la fe en° el poder de Dios que lo resucitó de entre los muertos.°
Os saluda Epafras° (el cual es uno de vosotros), siervo del Mesías, quien se esfuerza siempre por vosotros en las oraciones, para que estéis firmes, perfectos y totalmente decididos a cumplir toda la voluntad de Dios.
Porque os acordáis, hermanos, de nuestra fatiga y arduo trabajo, que trabajando de noche y de día, a fin de no ser gravosos a ninguno de vosotros, os proclamamos el evangelio de Dios.
ni comimos de balde el pan de nadie; sino que trabajamos con afán y fatiga de noche y de día, para no ser gravosos a ninguno de vosotros;
Por eso soporto todas estas cosas, por amor a los escogidos, para que ellos también obtengan la salvación que hay en Jesús el Mesías con gloria eterna.
pues todavía no habéis resistido° hasta derramar° sangre combatiendo contra el pecado;
os perfeccione en todo° lo bueno para que hagáis su voluntad, haciendo en nosotros° lo que es agradable delante de Él por medio de Jesús el Mesías, a quien sea la gloria por los siglos, amén.
y° tienes perseverancia, y soportaste por causa de mi nombre, y no has desmayado.