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Hechos 23:18 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia

18 Entonces el capitán llevó al joven ante el comandante y le dijo: – El prisionero Pablo me llamó y me pidió que trajese ante ti este joven, pues tiene una información importante para decirte.

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Biblia Reina Valera 1960

18 Él entonces tomándole, le llevó al tribuno, y dijo: El preso Pablo me llamó y me rogó que trajese ante ti a este joven, que tiene algo que hablarte.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

18 Entonces el oficial lo hizo y explicó: «El prisionero Pablo me llamó y me pidió que le trajera a este joven porque tiene algo que decirle».

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Biblia Católica (Latinoamericana)

18 El oficial se lo llevó ante el comandante y le dijo: 'El preso Pablo me llamó y me pidió que te trajera a este joven, pues tiene algo que decirte.

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La Biblia Textual 3a Edicion

18 Él entonces, tomándolo, lo lleva° ante el tribuno y le dice: El prisionero Pablo me llamó y me rogó que trajera ante ti a este joven, pues tiene algo que decirte.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

18-19 Él, tomándolo consigo, lo condujo hasta el tribuno y le dijo: 'El preso Pablo me ha llamado y pedido que te traiga este muchacho, porque tiene algo que decirte'. Tomándolo de la mano el tribuno y retirándose aparte, le preguntó: '¿Qué es lo que tienes que comunicarme?'.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

18 Entonces él le tomó y le llevó al tribuno, y dijo: El preso Pablo, llamándome, me rogó que trajese a ti a este joven, porque tiene algo que decirte.

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Hechos 23:18
11 Tagairtí Cros  

Entonces Jesús, respondiendo a lo que el fariseo estaba pensando, dijo: – Simón, tengo algo que decirte. Él respondió: – Dímelo maestro.


Entonces, el pequeño grupo de soldados romanos, el comandante y la policía del templo, tomaron y ataron a Jesús,


A la medianoche, Pablo y Silas oraban y cantaban himnos a Dios, y los otros presos escuchaban atentamente.


Este llamó a uno de los capitanes y le pidió: – Lleve a este joven al comandante, porque tiene algo muy importante que informarle.


Entonces el comandante tomó de la mano al joven, lo llevó aparte y le preguntó: – ¿Qué tienes que decirme?


Cuando se decidió que teníamos que navegar hacia Italia, entregaron tanto a Pablo como a otros prisioneros a un capitán romano llamado Julio, de un batallón especial que estaba al servicio del emperador.


Tres días después, Pablo mandó llamar a los principales judíos de la región, cuando se reunieron en la casa donde estaba custodiado, Pablo les dijo: – Hermanos, no he hecho nada en contra de nuestro pueblo ni en contra de las costumbres de nuestros antepasados. Sin embargo, fui detenido en Jerusalén por algunos judíos y me entregaron a los romanos;


Por este motivo, yo Pablo, soy prisionero de Jesucristo por causa de ustedes los que no son judíos.


Yo, que estoy prisionero por el hecho de servir al Señor, les aconsejo que se comporten dignamente, conforme a la vocación con la que fueron llamados.


Por medio del amor sacrificial te hago una gran invitación: ya siendo Pablo anciano, y con una gran experiencia pastoral, ahora siendo prisionero de Jesucristo,


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