y lo entregarán también a los gentiles para que se burlen de Él, lo azoten y lo crucifiquen, pero al tercer día resucitará.
Mateo 27:29 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia Luego, tejieron una corona de espinas y la pusieron sobre su cabeza. Le entregaron una vara en la mano derecha, simulando ser un cetro. Arrodillándose delante de Él, se burlaban diciendo: – ¡Viva el rey de los judíos! Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 y pusieron sobre su cabeza una corona tejida de espinas, y una caña en su mano derecha; e hincando la rodilla delante de él, le escarnecían, diciendo: ¡Salve, Rey de los judíos! Biblia Nueva Traducción Viviente Armaron una corona con ramas de espinos y se la pusieron en la cabeza y le colocaron una caña de junco en la mano derecha como si fuera un cetro. Luego se arrodillaron burlonamente delante de él mientras se mofaban: «¡Viva el rey de los judíos!». Biblia Católica (Latinoamericana) Después le colocaron en la cabeza una corona que habían trenzado con espinos y en la mano derecha le pusieron una caña. Doblaban la rodilla ante Jesús y se burlaban de él, diciendo: '¡Viva el rey de los judíos!' La Biblia Textual 3a Edicion Y trenzaron una corona° de espinas y la colocaron sobre su cabeza, y pusieron una caña en su diestra; y arrodillándose ante Él, se burlaron, diciendo: ¡Salve,° rey de los judíos! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Luego, le pusieron en la cabeza una corona que habían entretejido con espinas, y en la mano derecha una caña. Y doblando ante él la rodilla, se burlaban, diciendo: '¡Salve, rey de los judíos!'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y tejiendo una corona de espinas, la pusieron sobre su cabeza; y una caña en su mano derecha, e hincada la rodilla delante de Él, le escarnecían, diciendo: ¡Salve, Rey de los judíos! |
y lo entregarán también a los gentiles para que se burlen de Él, lo azoten y lo crucifiquen, pero al tercer día resucitará.
Y pusieron encima de su cabeza, de forma escrita, la causa de su sentencia a muerte: “ESTE ES JESÚS, EL REY DE LOS JUDÍOS”.
Lo vistieron de color morado, tejieron una corona de espinas y se la colocaron en la cabeza;
y empezaron a saludarle ceremoniosamente en forma sarcástica: – ¡Viva el rey de los judíos!