Pero Jesús dijo: – Dejen que los niños vengan a mí, y no se lo impidan, porque de ellos es el reino de los cielos.
Lucas 18:16 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia Mas Jesús llamó a los niños y dijo: – Dejen que los niños vengan a mí, no se los impidan; porque de ellos es el reino de Dios. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Mas Jesús, llamándolos, dijo: Dejad a los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de Dios. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces Jesús llamó a los niños y dijo a los discípulos: «Dejen que los niños vengan a mí. ¡No los detengan! Pues el reino de Dios pertenece a los que son como estos niños. Biblia Católica (Latinoamericana) Jesús pidió que se los trajeran, diciendo: 'Dejen que los niños vengan a mí y no se lo impidan, porque el Reino de Dios pertenece a los que son como ellos. La Biblia Textual 3a Edicion Pero Jesús los llamó, diciendo: Dejad que los niños vengan a mí y no se lo impidáis, porque de los tales es el reino de Dios. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Entonces Jesús los llamó junto a sí, diciendo: 'Dejad que los niños vengan a mí, y no se lo impidáis; pues el reino de Dios es de los que son como ellos. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Pero Jesús, llamándolos, dijo: Dejad los niños venir a mí, y no se lo impidáis; porque de los tales es el reino de Dios. |
Pero Jesús dijo: – Dejen que los niños vengan a mí, y no se lo impidan, porque de ellos es el reino de los cielos.
Traían a Jesús los niños para que Él los bendijera; cuando los discípulos vieron esto, regañaron a las personas que traían a los niños.
En verdad les digo que el reino de Dios le pertenece a los que son como niños, quien no reciba el reino de Dios como un niño, de ninguna manera entrará en él.
Porque la promesa también es para ustedes, para sus hijos, para los que están lejos, y para todos a los que el Señor nuestro Dios llame.
Hermanos, tengan un corazón como de niños, es decir, sean inocentes en cuanto a la malicia, pero piensen como personas maduras, sean adultos en su modo de pensar.
Porque el esposo no creyente es santificado en la fe de su esposa, y también la esposa no creyente es santificada en la fe de su esposo; si esto no fuera cierto, entonces sus hijos serían impuros, pero ahora ellos son santos.
como niños recién nacidos, busquen el alimento adecuado, la leche espiritual pura, que les ayuda a crecer de forma integral para la salvación,