¡Ay, cuando los hombres hablen bien de ustedes! Porque así también los antepasados de esa gente hablaron bien de los falsos profetas.
Juan 7:7 - NT Traducción Contemporánea de la Biblia El mundo no puede odiarlos, pero a mí sí me odia, porque he denunciado y testificado la maldad que hay en el mundo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 No puede el mundo aborreceros a vosotros; mas a mí me aborrece, porque yo testifico de él, que sus obras son malas. Biblia Nueva Traducción Viviente El mundo no puede odiarlos a ustedes, pero a mí sí me odia, porque yo lo acuso de hacer lo malo. Biblia Católica (Latinoamericana) El mundo no puede odiarlos a ustedes, pero a mí sí que me odia, porque yo muestro que sus obras son malas. La Biblia Textual 3a Edicion No puede el mundo aborreceros, pero a mí me aborrece, porque Yo testifico de él, que sus obras son malvadas. Biblia Serafín de Ausejo 1975 A vosotros no os puede odiar el mundo; pero a mí me odia, porque el testimonio que doy contra él es de que sus obras son malas. Biblia Reina Valera Gómez (2023) No puede el mundo aborreceros a vosotros, mas a mí me aborrece, porque yo testifico de él, que sus obras son malas. |
¡Ay, cuando los hombres hablen bien de ustedes! Porque así también los antepasados de esa gente hablaron bien de los falsos profetas.
Yo les di tu palabra y el mundo pecaminoso rechazó a los creyentes, porque ellos no son parte del sistema pecaminoso del mundo, como yo tampoco acepto el pecado del mundo.
Este es el juicio de condenación: que la luz ha venido al mundo, y la humanidad amó más las tinieblas que la luz, porque la humanidad siempre practicó las malas obras.
La mente gobernada por la carne busca ser enemiga de Dios, pues no se somete a la Ley de Dios ni es capaz de cumplirla;
¿Acaso me he convertido en el enemigo de ustedes por decirles la verdad?
¡Oh infieles! ¿No saben que la amistad con las tendencias pecaminosas del mundo es enemistad con Dios? Cualquiera que es amigo de las tendencias pecaminosas del mundo, se convierte en enemigo de Dios.
Ellos son del mundo, por eso hablan y se identifican con el mundo y el mundo a ellos los escucha con atención.