y se les ocurrió una nueva idea. Uno de ellos, abogado, preguntó a Jesús:
Tito 3:13 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Trata de ayudar a Zenas el abogado y a Apolos en el viaje que tienen que realizar. Ocúpate de que nada les falte, Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 A Zenas intérprete de la ley, y a Apolos, encamínales con solicitud, de modo que nada les falte. Biblia Nueva Traducción Viviente Haz todo lo que puedas para ayudar al abogado Zenas y a Apolos en su viaje. Asegúrate de que se les dé todo lo que necesiten. Biblia Católica (Latinoamericana) Toma todas las medidas necesarias para el viaje del abogado Zenas y de Apolo, de modo que nada les falte. La Biblia Textual 3a Edicion Provee diligentemente lo necesario para el viaje a Zenas, el abogado,° y a Apolos,° para que no les falte nada. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Prepara bien el viaje del abogado Zenas y de Apolo, para que nada les falte. Biblia Reina Valera Gómez (2023) A Zenas doctor de la ley, y a Apolos, encamínales con solicitud, de modo que nada les falte. |
y se les ocurrió una nueva idea. Uno de ellos, abogado, preguntó a Jesús:
Un maestro de la ley fue ante Jesús y lo quiso poner a prueba haciéndole esta pregunta: ―Maestro, ¿qué tengo que hacer para tener la vida eterna?
Un maestro de la ley le dijo: ―Maestro, cuando dices todo esto también a nosotros nos insultas.
»¡Ay de ustedes, maestros de la ley!, porque se han quedado con el control del conocimiento. Ustedes mismos no entran; y a los que quieren entrar, no los dejan».
Jesús les preguntó a los maestros de la ley y a los fariseos: ―¿Está permitido sanar a un enfermo en sábado?
Pero los fariseos y los maestros de la ley no quisieron que Juan los bautizara, y de esta manera rechazaron el propósito que Dios tenía para ellos.
Después que los envió la iglesia, a lo largo del camino fueron deteniéndose en las ciudades de Fenicia y Samaria para visitar a los creyentes y contarles cómo los gentiles también estaban convirtiéndose. Y esto llenó a todos de mucha alegría.
Mientras tanto, llegó a Éfeso, procedente de Alejandría, un judío llamado Apolos, hombre elocuente y poderoso en las Escrituras.
Mientras Apolos estaba en Corinto, Pablo viajaba por las regiones superiores y llegó a Éfeso. Allí encontró a varios discípulos.
Al cabo de la semana, cuando regresamos al barco, la congregación en pleno, incluyendo esposas e hijos, nos acompañaron hasta la orilla del mar, donde oramos
Nos atendieron muy bien y cuando llegó el momento de partir, nos dieron todo lo que necesitábamos para el viaje.
Estoy pensando ir a España; cuando lo haga, pasaré por Roma y tendré el gusto de estar con ustedes algún tiempo, tras lo cual espero que me ayuden a continuar mi viaje.
No permitan que nadie lo desprecie. Ayúdenlo para que siga su viaje en paz, para que pueda reunirse de nuevo conmigo, pues lo estoy esperando, así como a los hermanos que vengan con él.
Supliqué a Apolos que fuera con los demás hermanos a visitarlos, pero pensó que no era prudente que fuera ahora. Irá tan pronto como se le presente la oportunidad.