Si quieres salvar tu vida y la de tu hijo Salomón, haz lo que yo te diga.
Proverbios 27:9 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 El consejo sincero de un amigo endulza el alma, como el perfume y el incienso alegran el corazón. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 El ungüento y el perfume alegran el corazón, Y el cordial consejo del amigo, al hombre. Biblia Nueva Traducción Viviente El perfume y el incienso alegran el corazón, y el dulce consejo de un amigo es mejor que la confianza propia. Biblia Católica (Latinoamericana) El aceite y los perfumes alegran el corazón, la dulzura de la amistad reconforta el alma. La Biblia Textual 3a Edicion Los óleos y los perfumes alegran el corazón, Y el consejo del amigo endulza el alma. Biblia Serafín de Ausejo 1975 El perfume y el incienso alegran el corazón, la dulzura de la amistad alivia el alma. Biblia Reina Valera Gómez (2023) El ungüento y el perfume alegran el corazón: Y el amigo al hombre con el cordial consejo. |
Si quieres salvar tu vida y la de tu hijo Salomón, haz lo que yo te diga.
y vino para alegrarlo, y aceite de oliva como loción para su piel, y pan para fortalecerlo.
Es como el buen aceite que, desde la cabeza, va descendiendo por la barba, por la barba de Aarón, hasta el borde de sus vestiduras.
¡Haz que los justos me hieran! ¡Eso será bondad! Si ellos me reprenden, eso es medicina. No permitas que yo la rechace. Pero yo estoy en constante oración contra los malvados y sus hechos.
Preparas un banquete para mí, en presencia de mis enemigos. Me recibes como invitado tuyo, ungiendo con perfume mi cabeza. ¡Mi copa rebosa de bendiciones!
Qué grato es dar la respuesta adecuada, y todavía más grato cuando es oportuna.
Al sabio de corazón, se le llama inteligente; los labios convincentes promueven el saber.
¡Qué fragante es tu loción, y qué agradable tu nombre! Con razón te aman todas las doncellas.
¿Quién es este que irrumpe de los desiertos como nube de humo por la tierra, entre aromas de mirra e incienso y perfumes exóticos?
Cuán dulce es tu amor, amada mía, novia mía, Cuánto mejor que el vino. Más fragante es el perfume de tu amor que las más ricas especias.
Entonces, María tomó un frasco como de medio litro de perfume de nardo puro, que era muy caro, y lo derramó sobre los pies de Jesús, secándoselos luego con sus cabellos. Y la casa se llenó de la fragancia del perfume.
Los hermanos de Roma ya se habían enterado de nuestra llegada y salieron a recibirnos hasta el Foro de Apio y Tres Tabernas. Al verlos, Pablo le dio gracias a Dios y se animó.
pero este se negó. “¿Debo dejar de producir el aceite que Dios y el hombre bendicen sólo para ser grande entre los árboles?”, preguntó.