A los que te bendigan, yo los bendeciré; pero a quienes te maldigan, yo los maldeciré. ¡Por medio de ti, yo bendeciré a todos los pueblos del mundo!».
Mateo 1:1 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Estos son los antepasados de Jesucristo, descendiente de David y de Abraham: Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Libro de la genealogía de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abraham. Biblia Nueva Traducción Viviente El siguiente es un registro de los antepasados de Jesús el Mesías, descendiente de David y de Abraham: Biblia Católica (Latinoamericana) Libro de los orígenes de Jesucristo, hijo de David e hijo de Abrahán. La Biblia Textual 3a Edicion Libro° de la genealogía° de Jesús, el Mesías,° hijo de David, hijo de Abraham: Biblia Serafín de Ausejo 1975 Genealogía de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abrahán. Biblia Reina Valera Gómez (2023) El libro de la generación de Jesucristo, hijo de David, hijo de Abraham. |
A los que te bendigan, yo los bendeciré; pero a quienes te maldigan, yo los maldeciré. ¡Por medio de ti, yo bendeciré a todos los pueblos del mundo!».
Aquí termina la historia de la creación del cielo y de la tierra. Cuando Dios el Señor hizo la tierra y el cielo,
Por haberme obedecido, todas las naciones del mundo serán bendecidas por medio de tus descendientes.
Esta es la lista de los descendientes de Adán. El día en que los seres humanos fueron creados, Dios los creó a su propia imagen.
El Señor le hizo un juramento a David, y él nunca falta a sus promesas: «Pondré uno de tus descendientes en tu trono.
El Señor Dios dice: «He hecho un pacto con mi escogido; le he jurado a David mi siervo:
que su descendencia continuará para siempre y que su trono es tan seguro como lo es el sol.
La descendencia real de David será interrumpida, cortada como se hace con un árbol, pero del tronco surgirá un renuevo, una nueva rama de la antigua raíz.
De la cárcel y del juicio se lo llevaron a la muerte. Pero ¿quién entre el pueblo de aquel tiempo se dio cuenta de que era por los pecados de ellos que él moría, que él sufría el castigo que a ellos correspondía?
Porque llegará un día, dice el Señor, en que pondré como rey en el trono del rey David una Rama justa. Será un Rey que gobierne con sabiduría y rectitud, que hará que la justicia sea la norma de todas las personas en la tierra.
»Luego, en ese tiempo yo repararé la casa de David, repararé sus grietas, levantaré sus murallas, y haré que vuelva a ser tan importante como antes.
»En ese tiempo, el Señor defenderá al pueblo de Jerusalén; el más débil de sus habitantes será tan poderoso como el rey David. Y la descendencia real será como Dios mismo, como el ángel del Señor que va delante de ellos.
Así fue el nacimiento de Jesucristo. Su madre, María, estaba comprometida con José. Pero antes de la boda, el Espíritu Santo hizo que quedara encinta.
Abraham fue el padre de Isaac, Isaac de Jacob y Jacob de Judá y sus hermanos.
Una cananea, que vivía por allí, se le acercó suplicante: ―¡Ten misericordia de mí, Señor, Hijo de David! Mi hija tiene un demonio que la atormenta constantemente.
Cuando Jesús salía de las aguas del bautismo, los cielos se abrieron y vio que el Espíritu de Dios descendía sobre él en forma de paloma;
Cuando regresaba de la casa del jefe judío, dos ciegos lo siguieron gritando: ―¡Hijo de David, apiádate de nosotros!
y reinará para siempre sobre el pueblo de Jacob. Su reinado no tendrá fin.
La Escritura dice que el Cristo será descendiente de David, y que nacerá en Belén, el pueblo de donde era David.
Pero, como profeta, sabía que Dios le había prometido bajo juramento que un descendiente suyo se sentaría en el trono que ocupaba.
Son buenas noticias acerca de su Hijo, Jesucristo nuestro Señor. En su calidad de hombre era descendiente de la familia de David,
Está claro que Dios prometió otorgar toda la tierra a Abraham y a su descendencia, no en virtud de su obediencia a la ley, sino en virtud de la justicia que viene por la fe.
Los israelitas son descendientes de los patriarcas, y de ellos, según la naturaleza humana, nació Cristo, que es Dios sobre todas las cosas. ¡Bendito sea para siempre! Amén.
De la misma manera, Dios les hizo promesas a Abraham y a su descendencia. Noten ustedes que no dice que las promesas eran para los descendientes de Abraham, como si fueran muchos; sino que dice «para su descendencia»; pues bien, esa descendencia es Cristo.
Hay un solo Dios y un solo mediador entre Dios y los seres humanos, Jesucristo hombre.
Nunca te olvides de Jesucristo, descendiente de David, que resucitó de entre los muertos. Este es mi evangelio;
»Yo, Jesús, he enviado a mi ángel a anunciar estas cosas en las iglesias. Yo soy la raíz y la descendencia de David. Yo soy la estrella resplandeciente de la mañana».