Génesis 22:18 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

¹⁸ Por haberme obedecido, todas las naciones del mundo serán bendecidas por medio de tus descendientes.

Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

¹⁸ En tu simiente serán benditas todas las naciones de la tierra, por cuanto obedeciste a mi voz.

Biblia Nueva Traducción Viviente

¹⁸ y mediante tu descendencia, todas las naciones de la tierra serán bendecidas. Todo eso, porque me has obedecido.

Biblia Católica (Latinoamericana)

¹⁸ Y porque has obedecido a mi voz, todos los pueblos de la tierra serán bendecidos a través de tu descendencia.

La Biblia Textual 3a Edicion

¹⁸ y en tu simiente serán benditas todas las naciones de la tierra,° por cuanto has obedecido a mi voz.

Biblia Serafín de Ausejo 1975

¹⁸ Por haberme obedecido tú, todas las naciones de la tierra serán bendecidas en tu descendencia'.

Génesis 22:18 Tagairtí Cros

Génesis 12:2

Te voy a convertir en una nación muy grande; te voy a bendecir, y te haré un hombre muy famoso. ¡Serás de bendición para muchas personas!

Génesis 12:3

A los que te bendigan, yo los bendeciré; pero a quienes te maldigan, yo los maldeciré. ¡Por medio de ti, yo bendeciré a todos los pueblos del mundo!».

Génesis 18:18

¿Acaso no lo convertiré en una nación grande y poderosa, y haré que sea una fuente de bendición para todas las naciones de la tierra?

Génesis 18:19

Estoy seguro de que enseñará a sus descendientes a obedecerme, de modo que cuando él muera ellos continúen practicando la justicia y la honestidad. Yo, por mi parte, le cumpliré a Abraham todo lo que le he prometido».

Génesis 22:10

Enseguida Abraham tomó el cuchillo, para matar a su hijo.

Génesis 22:3

Al día siguiente, Abraham madrugó y ensilló su burro. Luego cortó la leña para el holocausto, y junto con dos de sus criados y su hijo Isaac salió rumbo al lugar que Dios le había indicado.

Génesis 28:14

Tus descendientes serán tantos como el polvo de la tierra. Llenarán la tierra de este a oeste y de norte a sur. Todas las naciones de la tierra serán bendecidas por medio de ti y de tu descendencia.

Salmos 72:17

Que su nombre perdure para siempre, y continúe mientras el sol brille. Que todos sean en él bendecidos; que todas las naciones lo alaben.

Éxodo 7:6

Moisés y Aarón hicieron lo que el Señor les había ordenado.

Jeremías 4:2

y si juras pertenecerme sólo a mí, el Dios viviente, e inicias una vida buena, honrada y limpia, serás testimonio para las naciones del mundo y estas acudirán a mí y servirán también para difundir mi gran fama!

Jeremías 7:23

Lo que les dije fue: ¡Sigan mis instrucciones y yo seré su Dios y ustedes serán mi pueblo; basta que hagan lo que les indico y todo les saldrá bien!

Mateo 1:1

Estos son los antepasados de Jesucristo, descendiente de David y de Abraham:

Hechos 3:25

Ustedes son los hijos de aquellos profetas y del pacto que Dios hizo con nuestros antepasados. Dios le prometió así a Abraham: “Por medio de tus descendientes bendeciré a todas las familias de la tierra”.

Romanos 1:3

Son buenas noticias acerca de su Hijo, Jesucristo nuestro Señor. En su calidad de hombre era descendiente de la familia de David,

Gálatas 3:16

De la misma manera, Dios les hizo promesas a Abraham y a su descendencia. Noten ustedes que no dice que las promesas eran para los descendientes de Abraham, como si fueran muchos; sino que dice «para su descendencia»; pues bien, esa descendencia es Cristo.

Gálatas 3:18

Si al obedecer esa ley recibiéramos la herencia, entonces ya no sería creyendo en la promesa de Dios. Sin embargo, Dios se la concedió a Abraham gratuitamente cuando Abraham confió en las promesas de Dios.

Efesios 1:3

Alabado sea Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, que nos bendijo con toda clase de bendiciones espirituales en los cielos porque pertenecemos a Cristo.

1 Samuel 2:30

»Por lo tanto, yo, el Señor Dios de Israel, declaro que aunque prometí que tu casa y la casa de tus antepasados llevarían el sacerdocio por siempre, no permitiré que se siga haciendo lo que tú haces. Honraré solamente a los que me honran, y despreciaré a los que me desprecian.