Lucas 18:9 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Jesús les contó esta parábola a unos que se creían muy justos y despreciaban a los demás: Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 A unos que confiaban en sí mismos como justos, y menospreciaban a los otros, dijo también esta parábola: Biblia Nueva Traducción Viviente Luego Jesús contó la siguiente historia a algunos que tenían mucha confianza en su propia rectitud y despreciaban a los demás: Biblia Católica (Latinoamericana) Jesús dijo esta parábola por algunos que estaban convencidos de ser justos y despreciaban a los demás. La Biblia Textual 3a Edicion A unos que confiaban° en sí mismos como justos y menospreciaban° a los demás, les propuso esta parábola: Biblia Serafín de Ausejo 1975 A algunos que presumían de ser justos y menospreciaban a los demás les dijo esta parábola: Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y también dijo esta parábola a unos que confiaban en sí mismos como justos, y menospreciaban a los otros: |
Pero unos a otros se dicen: «¡No te me acerques mucho, porque me contaminas, porque soy más santo que tú!». Ya no los soporto, día tras día me enfurecen.
Escuchen las palabras de Dios, todos los que le temen y tiemblan ante sus palabras: Sus hermanos los odian y los desechan por ser leales a mi nombre. «Den gloria a Dios», dicen burlándose, «gócense en el Señor». Pero ellos serán avergonzados debido a estas burlas.
para examinarlo al final de ese plazo. Si la llaga no se ha extendido ni se ha puesto amarillo el vello, y si no parece estar más hundida que el resto de la piel,
Pero él, queriendo justificarse, le volvió a preguntar: ―¿Y quién es mi prójimo?
Por eso, los fariseos y los maestros de la ley comenzaron a murmurar: Este hombre recibe a los pecadores y come con ellos.
Jesús les dijo: «Ustedes se hacen pasar por buenos delante de la gente, pero Dios conoce sus corazones. Les digo que aquello que la gente piensa que tiene mucho valor para Dios es despreciable.
El fariseo, de pie, oraba así: “Dios, te doy gracias porque no soy como otros hombres que son ladrones, malhechores, adúlteros; ni mucho menos soy como este cobrador de impuestos.
Al ver esto, todos empezaron a murmurar: ―Se fue a quedar en la casa de un pecador.
Cuando el fariseo que había invitado a Jesús vio esto pensó: «Si este hombre fuera profeta, sabría que lo está tocando una mujer que tiene mala fama».
Los judíos respondieron: ―Tenemos razón al decir que eres samaritano, y que estás endemoniado.
Entonces ellos lo insultaron y le dijeron: ―Discípulo de ese hombre lo serás tú. Nosotros somos discípulos de Moisés.
Ellos le respondieron: ―Tú, que desde que naciste eres un pecador, ¿vas a darnos lecciones a nosotros? Y lo echaron de allí.
Pero el Señor me dijo: “Vete, porque yo te enviaré a naciones que están lejos” ».
Como no conocen la manera en que Dios nos declara justos, tratan de hacerse justos a su propia manera, y así terminan rechazando la manera en que Dios quiere aceptarlos.
Tú no tienes derecho a criticar a tu hermano ni a menospreciarlo. Recuerda que cada uno de nosotros tendrá que comparecer personalmente ante el tribunal de Cristo.
El que cree que es correcto comer de todo no debe menospreciar al que no come ciertas cosas. Y el que no come de todo no debe condenar al que sí lo hace, porque Dios lo ha aceptado.
Por eso, antes de entender lo que la ley demanda, me sentía bien. Pero cuando llegó el mandamiento, cobró vida el pecado y morí.