Bésenle los pies, antes que se encienda su ira y perezcan en el camino, pues su ira se inflama de repente. ¡Dichosos los que en él buscan el refugio!
Juan 9:38 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 El hombre le dijo: ―Creo, Señor. Se puso de rodillas delante de Jesús, y lo adoró. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y él dijo: Creo, Señor; y le adoró. Biblia Nueva Traducción Viviente —¡Sí, Señor, creo! —dijo el hombre. Y adoró a Jesús. Biblia Católica (Latinoamericana) El entonces dijo: 'Creo, Señor'. Y se arrodilló ante él. La Biblia Textual 3a Edicion Y él dijo: Creo, Señor. Y lo adoró. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Entonces exclamó: '¡Creo, Señor!'. Y se postró ante él. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y él dijo: Creo, Señor; y le adoró. |
Bésenle los pies, antes que se encienda su ira y perezcan en el camino, pues su ira se inflama de repente. ¡Dichosos los que en él buscan el refugio!
El rey, tu señor, se deleita en tu belleza. Inclínate ante él con reverencia.
Los otros discípulos, maravillados, se arrodillaron y le dijeron: ―¡No cabe duda de que eres el Hijo de Dios!
Cuando lo vieron, lo adoraron, aunque algunos no estaban completamente convencidos de que en realidad era Jesús.
Mientras corrían, Jesús les salió al encuentro. ―¡Buenos días! —les dijo. Ellas cayeron sobre sus rodillas y, abrazándole los pies, lo adoraron.
cuando, de pronto, un leproso se le acercó y se puso de rodillas ante él. ―Señor —suplicó el leproso—, si quieres, puedes curarme.
Los discípulos, después de adorarlo, regresaron a Jerusalén llenos de alegría.
Entonces Jesús dijo: ―Yo he venido a este mundo para juzgarlo. Para que los ciegos vean, y para que se queden ciegos los que ven.