Nadie se entregó de tal manera a hacer el mal como Acab, porque Jezabel, su esposa, lo incitaba a que cometiera toda suerte de perversidades.
Juan 8:34 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Jesús respondió: ―Es bien cierto que el que peca es esclavo del pecado. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado. Biblia Nueva Traducción Viviente Jesús contestó: —Les digo la verdad, todo el que comete pecado es esclavo del pecado. Biblia Católica (Latinoamericana) Jesús les contestó: 'En verdad, en verdad les digo: el que vive en el pecado es esclavo del pecado. La Biblia Textual 3a Edicion Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo, que todo el que practica el pecado es esclavo del pecado. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Jesús les contestó: 'De verdad os aseguro: todo el que comete el pecado, es esclavo del pecado. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Jesús les respondió: De cierto, de cierto os digo: Todo aquel que hace pecado, esclavo es del pecado. |
Nadie se entregó de tal manera a hacer el mal como Acab, porque Jezabel, su esposa, lo incitaba a que cometiera toda suerte de perversidades.
Al malvado lo tienen atrapado sus propios pecados, son cuerdas que lo atan y retienen.
Les aseguro que mientras existan el cielo y la tierra, ni la parte más pequeña e insignificante de la ley se pasará por alto, hasta que esta se cumpla totalmente.
Jesús le dijo: ―Te aseguro que si una persona no nace de nuevo no podrá ver el reino de Dios.
No dejen que el pecado domine su cuerpo mortal; no lo obedezcan siguiendo sus malos deseos.
¿No comprenden que si ustedes se entregan a alguien como esclavos, los esclavizará para que le sirvan? Pueden escoger hacer: el pecado y morir, u obedecer y ser justos.
Sabemos que nuestra vieja naturaleza pecaminosa fue clavada en la cruz junto con Cristo; de esta manera, ya no está bajo el dominio del pecado, ni tiene que someterse a la esclavitud del pecado,
Sabemos que la ley es espiritual. El problema es que yo estoy vendido en esclavitud al pecado, a causa de mi naturaleza pecadora.
¡Gracias a Dios que Cristo lo ha logrado! En conclusión: con mi mente sirvo a la ley de Dios pero con mi naturaleza pecaminosa a la ley del pecado.
de que la creación será liberada de la corrupción a la que está sujeta. Así compartirá la gloriosa libertad de los hijos de Dios.
Vivían siguiendo la corriente de este mundo, obedecían los dictados del príncipe del imperio del aire, quien ahora mismo está operando en el corazón de los que se rebelan contra el Señor.
En otro tiempo, también nosotros éramos insensatos y desobedientes; con facilidad nos descarriábamos y vivíamos esclavos de los placeres y de los deseos pecaminosos. Estábamos llenos de rencor y envidia. Odiábamos a los demás y ellos nos odiaban a nosotros.
Les prometen que serán libres, cuando ellos mismos son esclavos de la corrupción, ya que uno es esclavo de cualquier cosa que lo domine.