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Jeremías 39:10 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008

Pero por toda la tierra de Judá dejó unos cuantos, de entre los más pobres, y les dio tierras y viñedos.

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Biblia Reina Valera 1960

Pero Nabuzaradán capitán de la guardia hizo quedar en tierra de Judá a los pobres del pueblo que no tenían nada, y les dio viñas y heredades.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Pero Nabuzaradán permitió que algunos de los más pobres se quedaran en la tierra de Judá, y los hizo responsables de cuidar los viñedos y los campos.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

En cuanto a los pobres, que no poseían ninguna cosa, los dejó en la tierra de Judá, dándoles, al mismo tiempo, viñas y campos.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Pero Nabuzaradán, capitán de la guardia, hizo que los más pobres del pueblo, los que no tenían nada, permanecieran en tierra de Judá, y les dio viñedos y heredades.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Pero de la gente pobre que no tenía nada, Nabuzardán, jefe de la escolta, dejó una parte en el país de Judá y les dio aquel día viñas y campos.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Pero Nabuzaradán, capitán de la guardia, dejó en tierra de Judá a los más pobres del pueblo, que no tenían nada, y en ese tiempo les dio viñas y campos.

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Jeremías 39:10
8 Tagairtí Cros  

Sin embargo, dejó a los más pobres de la tierra, para que se encargaran de cultivar los viñedos y los campos.


Cuando finalmente dejen de saquear, toda la nación será sólo un pastizal. Y afortunado será el granjero a quien al menos le quede una vaca y dos ovejas. Pero los abundantes pastos producirán mucha leche y todos los que queden se alimentarán de leche cuajada y miel silvestre.


En lo que a mí respecta, me quedaré en Mizpa e intercederé por ustedes ante los babilonios que vendrán acá como supervisores de mi administración. Establézcanse en cualquier ciudad que deseen, y vivan del producto de la tierra. Cosechen las uvas, los frutos de verano, las aceitunas, y almacénenlos.


Y cuando los jefes de los guerrilleros judíos que andaban por el campo oyeron que el rey de Babilonia había nombrado a Guedalías gobernador de los pobres de la tierra que se habían quedado, y no había exiliado a todos a Babilonia,


Entre la multitud había hombres, mujeres, niños y niñas, las hijas del rey y todos aquellos a quienes Nabuzaradán, el capitán de la guardia, había dejado con Guedalías. Hasta obligaron a Jeremías y a Baruc a ir con ellos.


Pero dejó algunos de los más pobres para que atendieran los cultivos como viñadores y labriegos.


«Hombre mortal, los pocos sobrevivientes esparcidos de Judá que viven entre las ciudades arruinadas insisten en decir: “¡Abraham era un hombre solo y sin embargo, obtuvo la posesión de todo el país! ¡Nosotros somos muchos, así que sin duda podremos obtenerla de vuelta!”».


Así que tomé dos varas de pastor y las llamé «Gracia» y «Unión», y apacenté las ovejas, es decir, a la gente más desprotegida del pueblo, en la forma que se me había ordenado.