Jesús alcanzó a oír aquellas palabras y les respondió: ―Porque los sanos no necesitan médico, y los enfermos sí.
3 Juan 1:2 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Querido hermano, ruego a Dios que en todo te vaya bien y que tu cuerpo esté tan saludable como lo está tu alma. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Amado, yo deseo que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma. Biblia Nueva Traducción Viviente Querido amigo, espero que te encuentres bien, y que estés tan saludable en cuerpo así como eres fuerte en espíritu. Biblia Católica (Latinoamericana) Muy querido amigo, sabiendo que tu alma va por el buen camino, te deseo que goces de buena salud y que todos tus caminos te den satisfacción. La Biblia Textual 3a Edicion ¡Oh amado, anhelo que en todas las cosas seas prosperado y tengas salud, así como prospera tu alma! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Querido hermano, deseo que en todo prosperes y que tengas salud tanto física como espiritual. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Amado, mi oración es que tú seas prosperado en todas las cosas, y que tengas salud, así como prospera tu alma. |
Jesús alcanzó a oír aquellas palabras y les respondió: ―Porque los sanos no necesitan médico, y los enfermos sí.
Es verdad que estuvo enfermo y casi se muere. Pero Dios se compadeció de él, y no sólo de él, sino también de mí, para que no tuviera más tristeza de la que ya tengo.
Cada uno debe buscar no sólo su propio bien, sino también el bien de los demás.
Amados hermanos, debemos dar gracias a Dios por ustedes, como es justo, porque ha crecido mucho su fe y el amor mutuo sigue abundando.
En cambio, nosotros tenemos que dar siempre gracias a Dios por ustedes, hermanos amados del Señor, porque Dios determinó desde el principio escogerlos para ser salvos. Esto mediante la acción del Espíritu Santo que los hace santos y la fe que han depositado en la verdad.
Sobre todo, hermanos míos, no juren ni por el cielo ni por la tierra ni por ninguna otra cosa. Cuando digan «sí», que sea sí; y cuando digan «no», que sea no. De esta manera no serán condenados.
Sobre todo, ámense en gran manera unos a otros, porque el amor cubre muchos pecados.
Más bien, crezcan en el amor y en el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo. ¡A él sea dada la gloria ahora y hasta la eternidad! Amén.
Estoy al tanto de que has sufrido mucho por el Señor y conozco tu pobreza. ¡Aunque eres rico! Conozco las difamaciones de los que se te oponen, que dicen ser judíos y no lo son, porque son una sinagoga de Satanás.