El hambre será tan terrible que se borrará el recuerdo de los años de abundancia.
1 Samuel 5:6 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Entonces el Señor atacó al pueblo de Asdod y los pueblos vecinos con una plaga de tumores. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y se agravó la mano de Jehová sobre los de Asdod, y los destruyó y los hirió con tumores en Asdod y en todo su territorio. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces la mano dura del Señor hirió a la gente de Asdod y de las aldeas cercanas con una plaga de tumores. Biblia Católica (Latinoamericana) La mano de Yavé se dejó caer sobre los habitantes de Asdod, los atormentó y les envió tumores tanto a Asdod como a sus alrededores. La Biblia Textual 3a Edicion Y la mano de YHVH se agravó sobre los de Asdod, y los castigó y los hirió con una epidemia de hemorroides en Asdod y en todos sus alrededores. Biblia Serafín de Ausejo 1975 La mano de Yahveh cayó pesadamente sobre los habitantes de Asdod llenándolos de consternación, pues hirió con tumores a los de Asdod y su comarca. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y se agravó la mano de Jehová sobre los de Asdod, y los destruyó, y los hirió con hemorroides en Asdod y en todos sus términos. |
El hambre será tan terrible que se borrará el recuerdo de los años de abundancia.
El Señor protege a todos los que lo aman, pero destruye a los malvados.
El Señor sostiene al humilde, pero derriba hasta el polvo al malvado.
Día y noche su mano pesaba sobre mí. Mi fuerza se evaporaba como agua en día de sol.
y derrotó a sus enemigos, y los rechazó, y los envió a eterna vergüenza.
el Señor hará que se desate una plaga mortal que destruirá los caballos, los burros, los camellos, los rebaños de ovejas, y las manadas de vacas.
La mano de Dios se está levantando contra ti y quedarás temporalmente ciego». Instantáneamente cayeron sobre él oscuridad y tinieblas, y comenzó a andar a tientas, suplicando que alguien le tomara la mano y lo guiara.
»El Señor enviará sobre ti las úlceras y las plagas de Egipto: tumores, sarna y tiña para las que no hallarás remedio.
Entonces convocaron nuevamente a las autoridades de las ciudades filisteas y les rogaron que devolviesen el cofre a su lugar para que no causara la muerte de todo el pueblo. La plaga ya había comenzado y el pánico estaba cundiendo por la ciudad.
Cuando los filisteos comprendieron lo que estaba ocurriendo, exclamaron: «¡No podemos tener el cofre del Dios de Israel aquí por más tiempo, porque todos moriremos juntamente con nuestro dios Dagón!».
Pero cuando el cofre llegó a Gat, el Señor atacó a la población, jóvenes y ancianos, con la plaga y hubo gran pánico.