1 Juan 3:19 - Biblica® Open Nueva Biblia Viva 2008 Así sabremos a ciencia cierta que somos de la verdad y nos sentiremos seguros ante la presencia de Dios. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y en esto conocemos que somos de la verdad, y aseguraremos nuestros corazones delante de él; Biblia Nueva Traducción Viviente Nuestras acciones demostrarán que pertenecemos a la verdad, entonces estaremos confiados cuando estemos delante de Dios. Biblia Católica (Latinoamericana) En esto conoceremos que somos de la verdad y se tranquilizará nuestra conciencia ante El. La Biblia Textual 3a Edicion En esto sabremos que somos° de la Verdad, y persuadiremos nuestro corazón delante de Él; Biblia Serafín de Ausejo 1975 En esto conoceremos que somos de la verdad y tendremos la conciencia tranquila ante él, Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y en esto conocemos que somos de la verdad, y aseguraremos nuestros corazones delante de Él. |
y, fruto de la justicia, la paz. La quietud y la confianza reinarán para siempre.
Si se aman unos a otros, todos se darán cuenta de que son mis discípulos».
Pilato le dijo: ―Entonces eres rey. Jesús le respondió: ―Tú eres el que dices que soy rey. Yo para esto nací y vine al mundo: para hablar de la verdad. Todo el que está de parte de la verdad, me escucha.
Estoy convencido de que nada podrá apartarnos de su amor; ni la muerte, ni la vida, ni los ángeles, ni los demonios, ni lo presente, ni lo que está por venir, ni los poderes,
Por ese motivo padezco estos sufrimientos. Mas no me avergüenzo, porque sé en quién he creído, y estoy seguro de que puede guardar lo que le he encomendado hasta el día de su retorno.
Y puesto que es así, acerquémonos a Dios con corazón sincero y con la plena seguridad que da la fe, ya que en nuestro interior hemos sido purificados de una mala conciencia y exteriormente hemos sido lavados con agua pura.
Todos ellos murieron sin haber recibido las cosas prometidas. Pero las vieron a lo lejos y reconocieron que ellos mismos eran extranjeros y sólo estaban de paso en la tierra.
Si decimos que no tenemos pecado, estamos engañándonos a nosotros mismos y no tenemos la verdad.
No les escribo porque necesiten conocer la verdad, sino precisamente porque pueden discernir entre la verdad y la mentira.
Si amamos a los demás hermanos, hemos pasado de la muerte a la vida. El que no ama a los demás está muerto.
Y aunque la conciencia nos acuse, Dios es más grande que nuestro corazón y él sabe todas las cosas.
Pero, amados míos, si nuestro corazón no nos acusa, podemos estar confiados ante Dios,