Al pasar los mercaderes madianitas, ellos sacaron a José de la cisterna. Vendieron a José a los ismaelitas por veinte monedas de plata, y éstos se lo llevaron a Egipto.
Jueces 8:22 - Biblia Martin Nieto Los israelitas dijeron a Gedeón: 'Reina sobre nosotros tú, tu hijo y tu nieto, porque nos has librado de la mano de los madianitas'. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y los israelitas dijeron a Gedeón: Sé nuestro señor, tú, y tu hijo, y tu nieto; pues que nos has librado de mano de Madián. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces los israelitas dijeron a Gedeón: —¡Gobiérnanos! Tú y tu hijo y tu nieto serán nuestros gobernantes, porque nos has rescatado de Madián. Biblia Católica (Latinoamericana) Los israelitas dijeron a Gedeón: 'Ya que nos libraste de la mano de los madianitas, tú serás nuestro rey, y después de ti, tu hijo y tu nieto'. La Biblia Textual 3a Edicion Y los hombres de Israel dijeron a Gedeón: Gobierna tú, y tu hijo, y el hijo de tu hijo sobre nosotros, pues nos has librado de la mano de Madián. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Dijeron entonces los israelitas a Gedeón: 'Reina sobre nosotros tú, tu hijo y tu nieto, pues nos has salvado del poder de Madián'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y los israelitas dijeron a Gedeón: Sé nuestro señor, tú, y tu hijo, y tu nieto; pues que nos has librado de mano de Madián. |
Al pasar los mercaderes madianitas, ellos sacaron a José de la cisterna. Vendieron a José a los ismaelitas por veinte monedas de plata, y éstos se lo llevaron a Egipto.
Y Jesús, dándose cuenta de que querían llevárselo para hacerle rey, se retiró otra vez al monte él solo.
Entonces Zébaj y Salmuná dijeron: 'Ánimo, mátanos tú; porque como es el hombre, así es su fuerza'. Entonces Gedeón se levantó, mató a Zébaj y Salmuná y se quedó con las lunetas que llevaban al cuello sus camellos.
Pero Gedeón les respondió: 'No reinaré yo sobre vosotros ni mi hijo, porque es el Señor quien debe reinar sobre vosotros'.
Sin embargo, cuando visteis que Najás, rey de los amonitas, venía contra vosotros, me dijisteis: No, que reine un rey sobre nosotros, siendo así que el Señor, vuestro Dios, es vuestro rey.
y le dijeron: 'Tú eres ya viejo, y tus hijos no siguen tus caminos. Danos un rey para que nos gobierne, como tienen todas las naciones'.