y él llamó a aquel pozo Seba. Por esto la ciudad lleva hoy el nombre de Berseba.
Josué 4:9 - Biblia Martin Nieto Después Josué erigió doce piedras en medio del Jordán, en el lugar donde habían estado los pies de los sacerdotes que llevaban el arca de la alianza, y allí están hasta el día de hoy. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Josué también levantó doce piedras en medio del Jordán, en el lugar donde estuvieron los pies de los sacerdotes que llevaban el arca del pacto; y han estado allí hasta hoy. Biblia Nueva Traducción Viviente Josué también apiló otras doce piedras a la mitad del Jordán, en el lugar donde estaban parados los sacerdotes que llevaban el arca del pacto. Y las piedras siguen allí hasta el día de hoy. Biblia Católica (Latinoamericana) Josué hizo que se erigieran doce piedras en el lecho del Jordán, en el lugar donde se detuvieron los pies de los sacerdotes que llevaban el Arca de la Alianza, y están allí todavía. La Biblia Textual 3a Edicion Josué también hizo erigir doce piedras en medio del Jordán, en el lugar donde habían estado los pies de los sacerdotes que cargaban el Arca del Pacto. Y allí están hasta este día. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Josué erigió doce piedras en medio del Jordán, en el lugar donde habían encontrado suelo firme los pies de los sacerdotes portadores del arca de la alianza, y allí están hasta el día de hoy. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Josué también levantó doce piedras en medio del Jordán, en el lugar donde estuvieron los pies de los sacerdotes que llevaban el arca del pacto; y han estado allí hasta hoy. |
y él llamó a aquel pozo Seba. Por esto la ciudad lleva hoy el nombre de Berseba.
Se levantó muy de mañana, tomó la piedra que había puesto por cabecera, la levantó a modo de estela y derramó aceite sobre ella.
Los de Beerot habían huido a Guitayín y allí están como refugiados hasta hoy.
tomó doce piedras, una por cada tribu de los hijos de Jacob, a quien había dicho: 'Te llamarán Israel',
Las barras eran tan largas que se podían ver sus extremidades desde la nave central, que estaba delante del lugar santísimo, aunque no desde fuera; allí han estado hasta el presente.
El Señor dijo a Moisés: 'Sube a la montaña y estate allí. Yo te daré unas tablas de piedra con la ley y los mandamientos que he escrito para instruirlos'.
Éstas piedras serán doce, según los nombres de las tribus de Israel; estarán grabadas como los sellos, cada uno con su nombre, según las doce tribus.
Ellos tomaron el dinero e hicieron como les habían dicho. Y este rumor se divulgó entre los judíos hasta el día de hoy.
El Señor lo enterró en el valle, en la tierra de Moab, enfrente de Bet Fegor, y nadie hasta hoy conoce su tumba.
Y escribió estas palabras en el libro de la ley de Dios. Tomó después una gran piedra y la levantó allí, debajo de la encina que había en el santuario del Señor.
Los sacerdotes que llevaban el arca de la alianza estuvieron a pie firme en medio del Jordán hasta que se cumplió todo lo que el Señor había ordenado a Josué, y el pueblo se apresuró a pasar.
Aquel hombre se fue al país de los hititas, edificó una ciudad y la llamó Luz, nombre que aún conserva hoy.
Y a partir de aquel día esto se convirtió en ley y norma para Israel hasta el día de hoy.
Samuel puso una piedra entre Mispá y Yesaná, y la llamó Ben Ezer, diciendo: 'Hasta aquí nos ha ayudado el Señor'.