Y yo pronunciaré mis sentencias contra ellas, contra toda su malicia, porque me han abandonado para quemar incienso a dioses extraños, para postrarse ante la obra de sus manos.
Jeremías 7:17 - Biblia Martin Nieto ¿Es que no ves lo que ellos hacen en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén? Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 ¿No ves lo que estos hacen en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén? Biblia Nueva Traducción Viviente ¿Acaso no ves lo que están haciendo en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén? Biblia Católica (Latinoamericana) ¿Es que no ves lo que ellos hacen en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén? La Biblia Textual 3a Edicion ¿Acaso no ves lo que están haciendo en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalem? Biblia Serafín de Ausejo 1975 ¿No estás viendo lo que hacen en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén? Biblia Reina Valera Gómez (2023) ¿No ves lo que estos hacen en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén? |
Y yo pronunciaré mis sentencias contra ellas, contra toda su malicia, porque me han abandonado para quemar incienso a dioses extraños, para postrarse ante la obra de sus manos.
Los caldeos que están atacando esta ciudad vendrán y la prenderán fuego, incendiarán sus casas, sobre cuyas terrazas se han ofrecido sacrificios a Baal y se han hecho ofrendas a dioses extraños para irritarme.
a causa de todas las iniquidades que el pueblo de Israel y el pueblo de Judá han cometido para irritarme, ellos y sus reyes, sus príncipes, sus sacerdotes, sus profetas, los hombres de Judá y los habitantes de Jerusalén.
sino que haremos decididamente todo lo que nos hemos propuesto: quemar incienso y hacer ofrendas de vino a la reina del cielo, tal como hemos hecho nosotros y como hicieron nuestros padres, nuestros reyes y nuestros príncipes en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén. Entonces tuvimos pan hasta hartarnos, éramos felices y no veíamos desventuras.
Yo os envié incesantemente, sin cansarme, a mis siervos los profetas para que os dijeran: no hagáis esas cosas horribles que yo detesto.
Por eso se encendieron mi furor y mi cólera y consumieron las ciudades de Judá y las calles de Jerusalén, dejándolas convertidas en desolación y ruinas, como lo están actualmente.
Yo te he establecido como examinador en medio de mi pueblo, para que conozcas y examines su conducta.
Y tú no intercedas en favor de este pueblo, no eleves por ellos súplicas ni oraciones, no insistas cerca de mí, pues yo no te escucharé.
Los niños amontonan leña y los padres encienden el fuego; las mujeres amasan harina para hacer tortas a la reina del cielo y presentan ofrendas en honor de dioses extranjeros para herirme a mí.
Ellos os consolarán cuando veáis su conducta y sus obras y os convenzáis de que no sin motivo hice todo lo que hice en Jerusalén', dice el Señor Dios.