Biblia Todo Logo
Bíobla ar líne
- Fógraí -





Jeremías 1:16 - Biblia Martin Nieto

16 Y yo pronunciaré mis sentencias contra ellas, contra toda su malicia, porque me han abandonado para quemar incienso a dioses extraños, para postrarse ante la obra de sus manos.

Féach an chaibidil Cóip


Tuilleadh leaganacha

Biblia Reina Valera 1960

16 Y a causa de toda su maldad, proferiré mis juicios contra los que me dejaron, e incensaron a dioses extraños, y la obra de sus manos adoraron.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Nueva Traducción Viviente

16 Pronunciaré juicio contra mi pueblo a causa de toda su maldad, por haberme abandonado y por quemar incienso a otros dioses. ¡Sí, ellos rinden culto a ídolos que hicieron con sus propias manos!

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Católica (Latinoamericana)

16 Voy a hacer justicia con este pueblo que me ha dejado para hacer el mal; ha quemado incienso a dioses extranjeros, y se ha puesto a servir a dioses que ellos mismos se fabricaron.

Féach an chaibidil Cóip

La Biblia Textual 3a Edicion

16 Y pronunciaré mis sentencias contra ellos a causa de toda su maldad, porque me abandonaron, quemaron incienso a dioses extraños y se postraron ante las obras de sus propias manos.

Féach an chaibidil Cóip

Biblia Serafín de Ausejo 1975

16 Pronunciaré mis sentencias contra ellos por toda su maldad, pues me abandonaron, incensaron a dioses extraños y adoraron las obras de sus manos.

Féach an chaibidil Cóip




Jeremías 1:16
44 Tagairtí Cros  

por haberme abandonado y haber quemado incienso a dioses extranjeros hasta provocar mi indignación con todas las obras de sus manos; mi cólera se encenderá contra este lugar y no se apagará.


salió al encuentro de Asá y le dijo: 'Óyeme, Asá, y escuchadme todos los de Judá y Benjamín. El Señor está con vosotros porque vosotros estáis con él. Cuando vosotros le buscáis, él se deja encontrar por vosotros; pero si lo abandonáis, él se aleja.


sino que siguió el camino de los reyes de Israel: hizo ídolos fundidos de Baal,


por haberme abandonado y haber quemado incienso a dioses extranjeros provocando mi indignación con todas las obras de sus manos. Mi cólera se encenderá contra este lugar y no se apagará.


Pero si os apartáis de mí y no guardáis mis leyes y mandamientos que yo os he prescrito, si os vais a servir y dar culto a dioses ajenos,


Su país está lleno de ídolos: ellos se postran ante la obra de sus manos, ante la hechura de sus dedos.


han arrojado al fuego a sus dioses, porque no eran dioses, sino obras de manos humanas, madera y piedra; por esto han podido destruirlos.


Todo esto lo emplea el hombre para hacer fuego y le sirve para calentarse; lo enciende también para cocer el pan. Y con esto mismo se fabrica además un dios para prosternarse ante él, se hace un ídolo para adorarlo.


a un pueblo que me provocaba a la cara continuamente, sacrificando en los huertos, quemando incienso en ladrillos,


Son cosas vanas, obras ridículas; en el tiempo del castigo desaparecerán.


Pues los dioses de esos pueblos son pura nada: un leño cortado en el bosque, labrado con azuela por las manos de un artífice,


Entonces las ciudades de Judá y los habitantes de Jerusalén podrán ir a pedir auxilio a los dioses a quienes han quemado incienso; a buen seguro que estos dioses no los salvarán en el día de su angustia.


Pues el Señor todopoderoso, que te había plantado, ha decretado contra ti la desgracia a causa de las iniquidades cometidas por la casa de Israel y la casa de Judá, que me han irritado quemando incienso a Baal'.


Tú me has abandonado -dice el Señor-, me has vuelto la espalda, y yo he extendido mi mano contra ti para aniquilarte: ¡Ya estoy cansado de compadecerme!


Les responderás: Porque vuestros padres me abandonaron y no observaron mi ley.


¡Oh esperanza de Israel, Señor, todos los que te abandonan serán cubiertos de vergüenza; los que se apartan de ti, serán condenados, porque abandonaron al Señor, la fuente de agua viva!


¡Pues mi pueblo me ha olvidado a mí y ofrece incienso a la pura nada! Han tropezado en sus caminos, en las sendas antiguas, para tomar veredas tortuosas, un camino no allanado;


me han abandonado, han enajenado este lugar, han ofrecido en él incienso a dioses extraños que no habían conocido ni ellos ni sus padres ni los reyes de Judá, han llenado este lugar de sangre inocente.


Doble iniquidad ha cometido mi pueblo: me han abandonado a mí, la fuente de agua viva para excavarse aljibes, aljibes agrietados, que no retienen agua.


¿No te ha sucedido esto por haber abandonado al Señor tu Dios, cuando él te guiaba por el camino?


Tus iniquidades te castigan, tus infidelidades te condenan. Date cuenta, comprende qué funesto es y qué amargo abandonar al Señor tu Dios, no tener ya temor de mí, dice el Señor Dios todopoderoso.


¿Dónde están los dioses que te has fabricado? ¡Levántense ellos a ver si te salvan en el tiempo de tu angustia! Porque tan numerosos como tus ciudades son tus dioses, oh Judá.


Un viento impetuoso viene contra mí. Y ahora voy a pronunciar sobre ellos la sentencia.


Por eso la tierra se pondrá de luto, y los cielos en lo alto se oscurecerán. Porque he hablado y no me arrepentiré; lo he resuelto y no me volveré atrás.


sino que haremos decididamente todo lo que nos hemos propuesto: quemar incienso y hacer ofrendas de vino a la reina del cielo, tal como hemos hecho nosotros y como hicieron nuestros padres, nuestros reyes y nuestros príncipes en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén. Entonces tuvimos pan hasta hartarnos, éramos felices y no veíamos desventuras.


¿Y no he de castigar todo esto? -dice el Señor-. ¿No me vengaré de una nación como ésta?


¿Y no he de castigar tales acciones? -dice el Señor-. ¿De una nación como ésta no he de vengarme?


Entonces todo hombre se siente estúpido, insensato; todo orfebre se avergüenza de su ídolo, porque lo que ha fundido no es más que mentira, que carece de aliento.


¿Es que no ves lo que ellos hacen en las ciudades de Judá y en las calles de Jerusalén?


Los niños amontonan leña y los padres encienden el fuego; las mujeres amasan harina para hacer tortas a la reina del cielo y presentan ofrendas en honor de dioses extranjeros para herirme a mí.


¡Cómo! ¡Robáis, matáis, cometéis adulterio, juráis en falso, ofrecéis sacrificios a Baal, corréis tras dioses que no conocéis,


las recubriste con tus vestidos recamados y ofreciste ante ellas mi aceite y mis perfumes.


Yo, el Señor, lo digo y lo hago; así sucederá; no me retraeré, no tendré piedad ni compasión. Te juzgaré según mi conducta y tus obras', declara el Señor Dios.


Cuanto más los llamaba, más se alejaban de mí. Ofrecían sacrificios a los baales y quemaban incienso a los ídolos.


De Israel procede, un artista lo ha fabricado; no, no es Dios. Pero el becerro de Samaría quedará hecho astillas.


El Señor da la voz al frente de sus tropas. Sí, innumerable es su ejército, poderoso el ejecutor de su palabra; sí, grande es el día del Señor, muy terrible; ¿quién podrá soportarlo?


Hicieron en aquellos días un becerro, ofrecieron sacrificios al ídolo y se regocijaron en la obra de sus manos.


El Señor mandará contra ti maldición, angustia y pánico en todas tus empresas, y en poco tiempo serás totalmente destruido por haberlo abandonado con tus malas acciones.


El Señor dijo a Moisés: 'Mira, ya vas a descansar con tus padres. Este pueblo se va a prostituir ante dioses extranjeros, los de la tierra que va a ocupar. Me abandonará y violará la alianza que he hecho con él.


Si abandonáis al Señor para servir a dioses extraños, él se volverá contra vosotros y, después de haberos hecho tanto bien, os hará el mal y os exterminará'.


Los demás hombres que no fueron exterminados por estas plagas no se arrepintieron de las obras de sus manos, ni cesaron de adorar a los demonios y a los ídolos de oro, de plata, de bronce, de piedra y de madera, que no podían ni ver, ni oír, ni caminar;


Lean orainn:

Fógraí


Fógraí