Y el rey de Babilonia los mandó matar en Ribla, en la tierra de Jamat. Así Judá fue deportado lejos de su tierra.
Jeremías 16:13 - Biblia Martin Nieto Pero yo os expulsaré de este país a un país desconocido para vosotros y para vuestros padres. Allí serviréis día y noche a otros dioses, porque yo no os concederé más misericordia. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Por tanto, yo os arrojaré de esta tierra a una tierra que ni vosotros ni vuestros padres habéis conocido, y allá serviréis a dioses ajenos de día y de noche; porque no os mostraré clemencia. Biblia Nueva Traducción Viviente Por lo tanto, los expulsaré de esta tierra y los enviaré a una tierra extraña en la que ni ustedes ni sus antepasados han estado. Allí podrán rendir culto a ídolos día y noche, y ¡no les concederé ningún favor!”. Biblia Católica (Latinoamericana) Los voy a echar de este país a otro que ni ustedes ni sus padres conocen; ¡allí podrán ustedes servir a esos dioses, día y noche, que yo ya no les haré más caso!' La Biblia Textual 3a Edicion Os arrojaré pues de esta tierra, a una tierra que ni vosotros ni vuestros padres conocisteis, y allá serviréis a dioses extranjeros día y noche, porque no os mostraré clemencia. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Por eso os expulsaré de este país a un país que no conocéis ni vosotros ni vuestros padres, y allí serviréis a otros dioses día y noche, pues no os concedo gracia'. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Por tanto, yo os arrojaré de esta tierra a una tierra que ni vosotros ni vuestros padres habéis conocido, y allá serviréis a dioses ajenos de día y de noche; porque no os mostraré clemencia. |
Y el rey de Babilonia los mandó matar en Ribla, en la tierra de Jamat. Así Judá fue deportado lejos de su tierra.
yo os arrancaré de mi tierra, que os he dado, y retiraré de mi presencia el templo que he consagrado a mi nombre, para que sea irrisión, burla y escarnio de todos los pueblos.
porque esto dice el Señor: 'Ved que voy a lanzar muy lejos a los habitantes del país esta vez, y los pondré en angustias a fin de que me encuentren'.
Oh Señor, esperanza de Israel, su salvador en el tiempo de la angustia, ¿por qué has de ser como un extranjero en este país, como un caminante que se detiene sólo para pernoctar?
El Señor me dijo: 'Aunque se presentaran ante mí Moisés y Samuel, mi alma no se inclinaría hacia este pueblo. Échalos de mi presencia, que se vayan.
Y te haré esclavo de tus enemigos en un país que no conoces, porque el fuego de mi cólera se enciende y va a arder sobre vosotros.
Y los convertiré en objeto de horror para todos los pueblos de la tierra, a causa de Manasés, hijo de Ezequías, rey de Judá, por los crímenes que perpetuó en Jerusalén.
Pues esto dice el Señor: 'No entres en la casa en que se hace duelo. No vayas a llorar, ni a consolarlos, porque -dice el Señor- yo he retirado de este pueblo mi paz, mi misericordia y mi compasión.
Tendrás que desprenderte de tu heredad que yo te había regalado, y te haré esclavo de tus enemigos en un país que no conoces, porque has encendido el fuego de mi cólera, que arderá eternamente.
Y te arrojaré a ti y a tu madre, que te dio a luz, a otra tierra donde no habéis nacido, pero donde moriréis.
¿Es acaso un vaso vil y roto este hombre, Jeconías, un objeto que ninguno quiere? ¿Por qué han sido expulsados él y su estirpe, y arrojados a una tierra que no conocían?
Y cuando pregunten: '¿Por qué el Señor, nuestro Dios, ha hecho todo esto con nosotros?', les responderás: 'Como vosotros me habéis abandonado para servir en vuestro país a dioses extraños, de igual modo serviréis a extranjeros en un país que no es vuestro'.
Tendrían que avergonzarse de sus acciones execrables, pero han perdido la vergüenza; no saben ya enrojecer. Por eso han de caer entre los que perecen, y se desplomarán cuando yo los visite -dice el Señor-.
El Señor te hará ir a ti y al rey que hayas constituido sobre ti a una nación desconocida para ti y para tus padres, y allí servirás a dioses extranjeros, hechos de leño y de piedra,
Las cosas ocultas pertenecen al Señor, nuestro Dios, pero las reveladas son para nosotros y nuestros hijos eternamente, para que pongamos en práctica todas las palabras de esta ley.