pero recibiréis la fuerza del Espíritu Santo, que vendrá sobre vosotros para que seáis mis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaría y hasta los confines de la tierra'.
Hechos 8:5 - Biblia Martin Nieto Felipe llegó a la ciudad de Samaría, y se puso a predicar a Cristo. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Entonces Felipe, descendiendo a la ciudad de Samaria, les predicaba a Cristo. Biblia Nueva Traducción Viviente Felipe, por ejemplo, se dirigió a la ciudad de Samaria y allí le contó a la gente acerca del Mesías. Biblia Católica (Latinoamericana) Así Felipe anunció a Cristo a los samaritanos en una de sus ciudades adonde había bajado. La Biblia Textual 3a Edicion Y Felipe, bajando a una° ciudad de Samaria, les predicaba al Mesías. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Felipe bajó a la ciudad de Samaría y les predicaba a Cristo. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Entonces Felipe descendió a la ciudad de Samaria, y les predicaba a Cristo. |
pero recibiréis la fuerza del Espíritu Santo, que vendrá sobre vosotros para que seáis mis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en Samaría y hasta los confines de la tierra'.
Al día siguiente partimos y llegamos a Cesarea. Fuimos a ver a Felipe, el evangelista, uno de los siete, y nos quedamos con él.
No dejaban un día de enseñar, en el templo y en las casas, y de anunciar la buena noticia de que Jesús es el mesías.
Agradó la proposición a toda la asamblea, y eligieron a Esteban, hombre lleno de fe y del Espíritu Santo, y a Felipe y Prócoro, a Nicanor y a Timón, a Parmenas y a Nicolás, prosélito antioqueno;
Aquel día se desencadenó una gran persecución contra la Iglesia de Jerusalén; y todos, excepto los apóstoles, se dispersaron por las regiones de Judea y Samaría.
El ángel del Señor dijo a Felipe: 'Ponte en marcha hacia el sur, por el camino que va de Jerusalén a Gaza a través del desierto'.
Felipe corrió, oyó que leía al profeta Isaías y dijo: '¿Entiendes lo que estás leyendo?'.
Felipe se encontró con que estaba en Azoto, y fue evangelizando todas las ciudades hasta llegar a Cesarea.
La gente escuchaba con atención a Felipe, pues había oído hablar de los milagros que hacía y ahora los estaban viendo:
Y en seguida se puso a predicar en las sinagogas proclamando que Jesús es el Hijo de Dios.
pero nosotros anunciamos a Cristo crucificado, escándalo para los judíos y locura para los paganos,
pues nunca entre vosotros me precié de saber otra cosa que a Jesucristo, y a Jesucristo crucificado.
Porque nadie puede poner otro fundamento que el que está ya puesto, que es Jesucristo.