Los oficiales del Faraón que la vieron se la elogiaron mucho al Faraón, y la mujer fue llevada a su palacio.
Génesis 20:2 - Biblia Martin Nieto Abrahán decía que Sara, su mujer, era su hermana. Y Abimelec, rey de Guerar, mandó que le trajeran a Sara. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Y dijo Abraham de Sara su mujer: Es mi hermana. Y Abimelec rey de Gerar envió y tomó a Sara. Biblia Nueva Traducción Viviente Abraham presentó a su esposa, Sara, diciendo: «Ella es mi hermana». Entonces el rey Abimelec de Gerar mandó llamar a Sara e hizo que la trajeran ante él a su palacio. Biblia Católica (Latinoamericana) Abrahán decía de su esposa Sara: 'Es mi hermana. Oyendo esto, el rey de Guerar, llamado Abimelec, mandó a buscarla para él. La Biblia Textual 3a Edicion Y decía Abraham respecto a Sara, su mujer: Es mi hermana.° Así que Abimelec, rey de Gerar, mandó a tomar a Sara. Biblia Serafín de Ausejo 1975 Como Abrahán solía decir de Sara, su mujer: 'Es mi hermana', Abimélec, rey de Guerar, ordenó que le trajesen a Sara. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Y dijo Abraham de Sara su esposa: Mi hermana es. Y Abimelec, rey de Gerar, envió y tomó a Sara. |
Los oficiales del Faraón que la vieron se la elogiaron mucho al Faraón, y la mujer fue llevada a su palacio.
Además, es verdad que ella también es mi hermana, hija de mi padre, pero no de mi madre, y ahora es mi mujer.
Por aquel tiempo Abimelec, acompañado por Picol, jefe de su ejército, fue a decir a Abrahán: 'Dios está contigo en todo lo que haces.
Hubo hambre en el país (otra distinta de la que hubo en tiempo de Abrahán), e Isaac se fue a Guerar con Abimelec, rey de los filisteos.
Abimelec dijo a Isaac: 'Vete de aquí, porque has llegado a ser más poderoso que nosotros'.
Las gentes del lugar le preguntaban si Rebeca era su mujer, y él respondía que era su hermana, pues tenía miedo de decir que era su mujer; porque como Rebeca era muy bella, pensaba que aquellos hombres podían matarle.
El profeta Jehú, hijo de Jananí, le salió al encuentro y le dijo: '¿Ayudas al malvado y amas a los enemigos del Señor para atraer así su ira contra ti?
Eliezer, hijo de Dodayas de Maresá, profetizó contra Josafat: 'Por haberte aliado con Ocozías, el Señor destruirá tu obra'. Las naves se destrozaron y no pudieron partir para Tarsis.
Cuando los príncipes de Babilonia le enviaron una embajada para preguntarle sobre el milagro que había tenido lugar en el país, si Dios le abandonó, fue sólo con el fin de probarlo y conocer el fondo de su corazón.
porque siete veces cae el justo, mas se levanta, pero los criminales se hundirán en la ruina.
El temer delante de los hombres es un lazo, el que confía en el Señor está seguro.
Tal es el que se acerca a la mujer de su prójimo; cualquiera que la toque no quedará impune.
Por esto, desterrad la mentira, y que cada uno diga la verdad a su prójimo, pues somos miembros los unos de los otros.
No os engañéis unos a otros, pues os habéis despojado del hombre viejo con su manera de actuar