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Efesios 2:14 - Biblia Martin Nieto

Él es nuestra paz; el que de ambos pueblos hizo uno, derribando el muro que los separaba, la enemistad;

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Biblia Reina Valera 1960

Porque él es nuestra paz, que de ambos pueblos hizo uno, derribando la pared intermedia de separación,

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Pues Cristo mismo nos ha traído la paz. Él unió a judíos y a gentiles en un solo pueblo cuando, por medio de su cuerpo en la cruz, derribó el muro de hostilidad que nos separaba.

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Biblia Católica (Latinoamericana)

El es nuestra paz. El ha destruido el muro de separación, el odio, y de los dos pueblos ha hecho uno solo. En su propia carne

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La Biblia Textual 3a Edicion

Porque Él es nuestra paz, que de ambos° hizo uno, y derribó la pared intermedia de separación, es decir, la enemistad;

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Pues él es nuestra paz, el que de los dos pueblos hizo uno, derribando el muro medianero de la separación, la enemistad, y en su carne

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Porque Él es nuestra paz, que de ambos hizo uno, derribando la pared intermedia de separación;

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Efesios 2:14
28 Tagairtí Cros  

Amán dijo al rey Asuero: 'En medio de las incontables gentes de tu reino y por todas las provincias hay esparcido y diseminado un pueblo, separado de los demás, que tiene leyes diferentes y no cumple las órdenes del rey. Los intereses del reino no permiten tolerarlo.


Ellos pastorearán a Asiria con la espada y el país de Nemrod con el acero. Ellos nos librarán del asirio cuando invada nuestra tierra y ponga el pie en nuestro suelo.


Él construirá el templo del Señor, será revestido de majestad y se sentará en el trono para gobernar. Tendrá un sacerdote a su derecha y habrá perfecto acuerdo entre los dos.


para iluminar a los que yacen en tinieblas y en sombras de muerte, / y para guiar nuestros pasos por el camino de la paz'.


'Gloria a Dios en el cielo y paz en la tierra a los hombres que él ama'.


Tengo otras ovejas que no son de este redil. También a ellas tengo que apacentarlas. Ellas escucharán mi voz, y habrá un solo rebaño y un solo pastor.


y no sólo por la nación, sino también para reunir a los hijos de Dios dispersos.


Os he dicho estas cosas para que tengáis paz en mí. En el mundo tendréis tribulaciones; pero tened ánimo, que yo he vencido al mundo'.


y les dijo: 'Vosotros sabéis que a un judío le está prohibido juntarse con extranjeros y entrar en su casa. Pero Dios me ha enseñado a no llamar profano o impuro a ningún hombre;


Él ha enviado su palabra a los israelitas anunciando la paz por medio de Jesucristo, que es el Señor de todos.


Justificados por la fe, estamos en paz con Dios por nuestro Señor Jesucristo.


No hay judío ni griego, no hay esclavo ni libre, no hay hombre ni mujer, pues todos vosotros sois uno en Cristo Jesús.


anulando en su propio cuerpo la ley, sus mandamientos y decretos. Él ha formado de los dos, en su propia persona, una nueva humanidad, haciendo así la paz.


con su venida anunció la paz a los que estabais lejos y a los que estaban cerca;


del que toma su nombre toda familia en el cielo y en la tierra,


Por él, el cuerpo entero, trabado y unido por medio de todos sus ligamentos, según la actividad propia de cada miembro, crece y se desarrolla en el amor.


Quiso también por medio de él reconciliar consigo todas las cosas, tanto las de la tierra como las del cielo, pacificándolas por la sangre de su cruz.


Si habéis muerto con Cristo a los elementos del mundo, ¿por qué os sometéis como si todavía fueseis del mundo a preceptos como:


Ya no hay distinción entre griego y judío, circunciso o incircunciso, extranjero o ignorante, esclavo o libre, sino que Cristo es todo en todos.


Que la paz de Cristo reine en vuestros corazones, en la que fuisteis llamados para formar un solo cuerpo. Y sed agradecidos.


El Dios de la paz, que por la sangre de la alianza eterna resucitó de entre los muertos al gran Pastor de las ovejas, nuestro Señor Jesucristo,


y a quien Abrahán dio la décima parte de todo;