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2 Reyes 4:7 - Biblia Martin Nieto

Entonces ella fue a contar la cosa al hombre de Dios, el cual le dijo: 'Anda, vende el aceite, paga a tu acreedor, y tú y tus hijos vivid de lo restante'.

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Biblia Reina Valera 1960

Vino ella luego, y lo contó al varón de Dios, el cual dijo: Ve y vende el aceite, y paga a tus acreedores; y tú y tus hijos vivid de lo que quede.

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Biblia Nueva Traducción Viviente

Cuando ella le contó al hombre de Dios lo que había sucedido, él le dijo: «Ahora vende el aceite de oliva y paga tus deudas; tú y tus hijos pueden vivir de lo que sobre».

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Biblia Católica (Latinoamericana)

Fue a contar todo eso al hombre de Dios, el cual le dijo: 'Anda a vender el aceite y paga así tu deuda; lo que quede te permitirá vivir junto con tus hijos'.

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La Biblia Textual 3a Edicion

Y ella fue y se lo dijo al varón de Dios, y él respondió: Ve, vende el aceite, y paga tu deuda, y vive tú y tus hijos de lo que sobre.

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Biblia Serafín de Ausejo 1975

Fue ella a contárselo al varón de Dios y éste le dijo: 'Anda, vende el aceite y paga a tu acreedor y de lo que te quede viviréis tú y tus hijos'.

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Biblia Reina Valera Gómez (2023)

Vino ella luego, y lo contó al varón de Dios, el cual dijo: Ve, vende el aceite y paga tu deuda; y tú y tus hijos vivid de lo que quede.

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2 Reyes 4:7
11 Tagairtí Cros  

Pero Dios dijo a Semayas, hombre de Dios:


Ella entonces lo subió y lo puso en el lecho del hombre de Dios; luego cerró la puerta y salió.


Aquella mujer dijo a su marido: 'Mira, me he dado cuenta de que es un hombre de Dios, un santo, ese que pasa siempre por nuestra casa.


Eliseo le dijo: 'Agárrala', y el otro alargó la mano y la recogió.


Pero el hombre de Dios mandó a decir al rey de Israel: 'No pases por tal lugar, porque los sirios están allí emboscados'.


El injusto pide prestado y no devuelve, mientras que el justo se compadece y da.


No devolváis a nadie mal por mal. Procurad hacer el bien ante todos los hombres.


Por lo demás, hermanos, considerad lo que hay de verdadero, de noble, de justo, de puro, de amable, de buena fama, de virtuoso, de laudable;


Así llevaréis una vida honrada a los ojos de los de fuera y no tendréis necesidad de nadie.