Elías le respondió: 'Si yo soy un hombre de Dios, que baje fuego del cielo y te devore a ti y a tus cincuenta'. Bajó fuego del cielo, y lo devoró a él y a sus cincuenta.
2 Reyes 1:11 - Biblia Martin Nieto Ocozías volvió a enviarle otro capitán con sus cincuenta, el cual fue y le dijo: 'Hombre de Dios, el rey ordena que vayas en seguida'. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 Volvió el rey a enviar a él otro capitán de cincuenta con sus cincuenta; y le habló y dijo: Varón de Dios, el rey ha dicho así: Desciende pronto. Biblia Nueva Traducción Viviente Entonces el rey envió a otro capitán con otros cincuenta hombres, y el capitán dijo a Elías: —Hombre de Dios, el rey te exige que bajes de inmediato. Biblia Católica (Latinoamericana) El rey despachó de nuevo a cincuenta hombres con su jefe; éste también le gritó: '¡Hombre de Dios, esta es la orden del rey: Apresúrate en bajar!' La Biblia Textual 3a Edicion Y volvió a enviarle otro capitán de cincuenta con sus cincuenta quien le dijo: Varón de Dios, así ha dicho el rey: ¡Apresúrate y baja! Biblia Serafín de Ausejo 1975 Volvió a enviarle el rey otro jefe de cincuenta con sus cincuenta hombres, que subió y le dijo: 'Hombre de Dios, esto ordena el rey: '¡Baja en seguida!''. Biblia Reina Valera Gómez (2023) Volvió el rey a enviar a él otro capitán de cincuenta con sus cincuenta; y le habló, y dijo: Varón de Dios, el rey ha dicho así: Desciende pronto. |
Elías le respondió: 'Si yo soy un hombre de Dios, que baje fuego del cielo y te devore a ti y a tus cincuenta'. Bajó fuego del cielo, y lo devoró a él y a sus cincuenta.
Elías respondió: 'Si yo soy un hombre de Dios, que baje fuego del cielo y te devore a ti y a tus cincuenta'. Bajó fuego del cielo y lo devoró a él y a sus cincuenta.
Cuando el gobernante hace caso de las mentiras, corrompe a todos sus servidores.
Señor, alzada está tu mano; pero ellos no la miran. ¡Vean tu celo por tu pueblo, y se avergüencen, y el fuego preparado para tus enemigos los devore!
También son perversas las armas del mentiroso. Tramas inicuas urde para perder a los humildes con mentiras, y a los pobres que reclaman su derecho.
¡Oh Señor!, ¿no buscan tus ojos la verdad? Tú les has herido, y no han acusado el golpe; los has aplastado, y no han querido aprender la lección. Han endurecido su frente como la roca, han rehusado convertirse.
Entonces Herodes, al ver que los magos se habían burlado de él, montó en cólera y mandó matar a todos los niños de Belén y de todo su territorio, de dos años para abajo, según el tiempo que había calculado por los magos.
Fijaos bien: si va por el camino de su territorio hasta Bet Semes, es él quien nos ha hecho tanto mal; si no, sabremos que no ha sido su mano la que nos ha castigado, y que esto ha ocurrido por casualidad'.