Grito de espanto resuena en sus oídos; mientras vive en paz, el azote lo sorprende.
1 Juan 4:18 - Biblia Martin Nieto En el amor no hay temor; por el contrario, el amor perfecto desecha el temor, pues el temor supone castigo, y el que teme no es perfecto en el amor. Tuilleadh leaganachaBiblia Reina Valera 1960 En el amor no hay temor, sino que el perfecto amor echa fuera el temor; porque el temor lleva en sí castigo. De donde el que teme, no ha sido perfeccionado en el amor. Biblia Nueva Traducción Viviente En esa clase de amor no hay temor, porque el amor perfecto expulsa todo temor. Si tenemos miedo es por temor al castigo, y esto muestra que no hemos experimentado plenamente el perfecto amor de Dios. Biblia Católica (Latinoamericana) En el amor no hay temor. El amor perfecto echa fuera el temor, pues hay temor donde hay castigo. Quien teme no conoce el amor perfecto. La Biblia Textual 3a Edicion En el amor no hay temor, antes bien, el perfecto amor echa afuera el temor, pues el temor lleva en sí mismo castigo,° de donde el que teme no ha sido perfeccionado en el amor. Biblia Serafín de Ausejo 1975 No hay temor en el amor; sino que el amor perfecto echa fuera el temor, porque el temor supone castigo, y el que teme no es perfecto en el amor. Biblia Reina Valera Gómez (2023) En el amor no hay temor; mas el perfecto amor echa fuera el temor, porque el temor conlleva castigo. Y el que teme no ha sido perfeccionado en el amor. |
Grito de espanto resuena en sus oídos; mientras vive en paz, el azote lo sorprende.
ante ti se estremece mi cuerpo de terror, tengo miedo de tus decisiones.
Pero los fariseos decían: 'Echa a los demonios con el poder del príncipe de los demonios'.
Porque no recibisteis el espíritu de esclavitud para recaer de nuevo en el temor, sino que recibisteis el espíritu de hijos adoptivos, que nos hace exclamar: ¡Abba! ¡Padre!
Pues el Señor no nos ha dado espíritu de temor, sino de fortaleza, de amor y de prudencia.
Así pues, puesto que entramos en posesión de un reino inmutable, retengamos firmemente la gracia, y por ella ofrezcamos a Dios un culto agradable con reverencia y con respeto.
¿Tú crees que hay un solo Dios? Muy bien. Los demonios lo creen también, y tiemblan.
Jamás ha visto nadie a Dios. Si nos amamos los unos a los otros, Dios está en nosotros, y su amor en nosotros es perfecto.